Autor: Saiikeiilove
Resumen: han pasado 3 años desde que News volvió como 4, las cosas parecen haber cambiado ultimamente, sobre todo por un acontecimiento que será la tortura de Shige.
Pareja: Koyashige
Genero: Yaoi, drama, romantico
Advertencia: lemon
El tour había acabado hacia tan solo unas semanas.
Aquel día habían estado hablando sobre el nuevo single, escogiendo la canción
que seria el siguiente trabajo de News.. esta vez una preciosa balada.
Era hora de volver a casa; y ante la idea de estar
completamente solo esa noche debido al trabajo de su esposa, Koyama suspiró
pesadamente tras recoger sus cosas.
Kana había tenido que viajar esa misma mañana a
otra cuidad, no volvería hasta la tarde del día siguiente.. y Keiichiro no
quería sentirse solo esa noche. Miró a Shige quien se apresuraba en recoger e
incluso se arreglaba un poco el pelo mirándose en un espejo.. seria la
oportunidad perfecta para quedar con él, para salir juntos esa noche a cenar ¿y
por qué no? tomar alguna copa. Después de todo, no habían salido juntos a
divertirse en mucho tiempo.
-Shige-chan~~- se presentó completamente sonriente
ante el más joven, sobresaltándole un poco.
-¡Koyama! me has asustado.. no aparezcas como los
fantasmas.- rió tontamente y se despidió de Tegomass cuando ellos ya se
marchaban.
-Nee Shige~~
¿por qué no salimos esta noche? tengo ganas de ir a cenar y beber algo..
además, hace mucho que no quedamos.- por un momento, incluso se sintió nervioso
al pedirle aquello.. Shige había estado algo distante con él desde aquel
incidente en las termas semanas atrás.
Le miró atentamente.. Koyama tenia esa sonrisita
nerviosa en sus labios, y un cierto aire de esperanza en su mirada.. esa noche
él estaba solo ¿verdad? por eso le había propuesto salir.. no estaba dispuesto
a ser el segundo plato; ni de él ni de nadie.
-Lo siento.. pero ya tengo planes, he quedado.- se
echó la mochila al hombro y caminó hacia la puerta.
-Espera... vamos Shige, no es cierto ¿verdad?- ya
le conocía; seguro que pensaba quedarse en casa leyendo tranquilamente. -si lo
prefieres podemos ir a tu casa y ver alguna película.. algo más tranquilo.- en
realidad la daba igual, solo quería pasar algo de tiempo con su mejor amigo.
-No.. en serio Keii, no puedo.- salió de la sala
con Keiichiro caminando tras él... ¿pensaba seguirle? -en realidad.. he
quedado.- el ascensor llegó a la planta baja y allí se detuvo.
-¿Has quedado..? ¿con un.. amigo?- por un momento
temió la respuesta recordando aquella ultima conversación en Sendai en la que
Shige le había dicho que salía con alguien respondiéndole a su propia pregunta.
Se mordió los labios al darse cuenta de que
aquello parecía ser verdad... y no le hizo falta que Kato le respondiera para
adivinar que tenia una cita cuando vio a un chico joven esperando en la puerta
de la empresa..
-Te lo dije ¿no? Que salía con alguien.- allí estaba; un chico a quien había conocido
un par de semanas después de soltarle aquella mentira a su amigo, estudiante de
primer año de la universidad donde él mismo se había graduado.
Ambos le miraron; un joven de cabello castaño, un
poco más bajo que Shige, y con una bonita y cordial sonrisa se acercaba a
ellos. Saludó amablemente, y Keiichiro no pudo evitar mirarlo bien de arriba a
abajo.. realmente era un crío.
-¿No.. nos vas a presentar?- preguntó sin dejar de
mirar al chico, sintiendo como si algo atravesara su pecho.. ¿eran celos? Tenia
la esperanza de que Shige aquella vez le hubiera mentido.
-Claro...- se puso algo nervioso e hizo las
presentaciones.. aquella situación era un tanto incomoda. -bueno Koyama.. tengo
que marcharme, nos vemos el próximo día en el trabajo.- se despidió rápidamente
y se alejó de allí con el muchacho mientras este le contaba lo que había hecho
ese día en la universidad.
Koyama se quedó mirándoles fijamente. ¿De verdad
Shige estaba saliendo con ese chico? ¿cuantos años le llevaba? Unos 8 años... si, más o menos andaría por ahí.
-¿En qué estas pensando?- se preguntó a si mismo
¡aquello incluso podría ser delito por salir con un menor!
Suspiró pesadamente y tomó su camino volviendo a
su casa.. después de todo, Shige tenia derecho a salir con alguien ¿no? pero
entonces, ¿por qué sentía esos celos tan molestos? solo había una respuesta
para ello.. seguía enamorado de su mejor amigo.
*******************************
-Kato-sensei, no entiendo esto...- aquel chico le
estaba llamando, pero Shige andaba metido en su propio mundo. -Kato-sensei~~- le volvió a llamar..
Su mirada se perdía en las gotas de lluvia
golpeando insistentemente el cristal de la ventana. No le gustaba la lluvia..
siempre le hacia sentir melancólico, triste.. y desde hacia un tiempo, le hacia
pensar en él.
Koyama les había visto juntos.. seguro que se
había dado cuenta de que salía con ese muchacho a quien había comenzado a dar
clases hacia apenas un mes. ¿Pero y qué importaba? Koyama estaba casado, ¡él
también tenia derecho a salir con alguien! En un principio incluso le había
mentido sobre que salía con alguien, y de hecho, quería olvidar a Keiichiro.
Entonces.. ¿por qué se sentía culpable? ¿como si le estuviera engañando?
Salió de sus pensamientos cuando el chico le llamó
por cuarta vez, esta vez acercándose más a él y rodeando su cuello con los
brazos.
-Lo siento Takumi-kun... estaba algo distraído.-
sonrió suavemente, pero cuando miró al muchacho, este fue a sentarse sobre sus piernas.. -¿qué..
haces?-
-Creo que estas algo cansado, podríamos pasar de
los estudios por hoy ¿no?- le preguntó intentando provocarle, escondiéndose en
el cuello de Kato y respirando sobre él. -además.. no hemos pasado de los
besos, me gustaría... acostarme contigo..- ante aquellas palabras, Shige abrió
los ojos de par en par. -no será mi primera vez, así que no te preocupes..-
-Takumi-kun, no creo que...- iba a decirle que no
era buena idea, pero el chico silenció sus labios con un beso.
Por un momento se dejó llevar.. sintiendo como ese
crío le besaba de una forma casi experta, como las manos de este iban a su
pecho para desabotonar su camisa.. pero entonces detuvo sus manos tomándole de
las muñecas.
Le miró fijamente a los ojos. Llevaba unas 3
semanas dándole clases, 3 semanas durante las cuales habían acabado besándose..
ese muchacho era un saco de hormonas revolucionadas, y él, llevaba meses sin
estar con alguien.. ¿qué mal podría hacerle? necesitaba olvidarse de Koyama,
dejar a un lado la tonteria de que su mejor amigo fuera la única persona con
quien había hecho el amor en toda su vida.. aunque aquello, tan solo él lo
sabia.
-Vamos a la cama.- le susurró decidido, dispuesto
a romper con aquella tontería.. después de todo, Koyama había sido el primero
en dar aquel paso...
******
No había soportado quedarse en su casa solo, y
mucho menos andar pensando en lo que Shige y ese niño estarían haciendo. Así
que a pesar de la lluvia de aquella noche, decidió salir; calmarse de alguna manera, y sobre todo no
pensar.
Pidió una copa más; necesitaba beber y olvidarse
de todo eso.. dejar de pensar en su mejor amigo como su fuera su ex novio del
que seguía enamorado.. solo había sido sexo, nada más.
-No es cierto...- murmuró para si mismo perdiendo
su mirada en la copa.
Jamás había sido solo sexo.. se había enamorado
como un tonto, pero Shige nunca había dado señales de que quisiera algo más..
por eso había tomado la decisión de casarse... incluso le había dado un
ultimátum a su mejor amigo.. pero aun con eso, Shige jamás se había dado
cuenta, jamás le había confesado que también estuviera enamorado de él..
Flashback.
-Cumpleaños feliz~ cumpleaños feliz~~ te deseo Keiichiro.. cumpleaños feliz~~-
sonrió ante la mirada sorprendida y algo avergonzada del líder cuando apareció
ante él con el desayuno y un pequeño dulce con una vela en el centro.
-Shige~~
¡es vergonzoso!- rió cubriéndose hasta la cabeza con las sabanas.
-¡No lo es! vamos sopla, solo una vez en la vida
se cumplen los 30 ¿no?- se sentó junto a él poniéndole la bandeja sobre las
piernas, incitándole a soplar esa velita.
Lo hizo.. sopló la vela en aquel pequeño pastel
que Kato el había llevado con el desayuno esa mañana. Rió al oír los aplausos
de su amigo, y seguidamente, dio un mordisco al dulce.
-Delicioso.- se relamió los labios limpiando el
chocolate y se volvió a mirarle. -gracias, ha sido una sorpresa.- le robó un
beso y siguió comiéndose el dulce con una sonrisa.
Shige sonrió ante aquella escena. Habían pasado la
noche anterior juntos, en su casa, haciendo el amor como muchas veces atrás.
Ese día, Koyama cumplía sus 30 años, y aunque sabia que él tendría que
trabajar, había decidido darle aquella pequeña sorpresa con el desayuno.
-¿Qué se siente al tener 30 y ser todo un adulto?-
le preguntó divertido mientras tomaba su café y no dejaba de ver aquella
expresión infantil en el rostro de su amigo.
-Pues.. aun no lo se..- rió tontamente, pero en
realidad, sentía que le faltaba algo.
-Está bien, te dejaré tiempo para que lo
pienses... voy a ducharme.- le sonrió y se levantó de la cama para ir al baño,
en ese momento, Koyama se quedó mirándole perdidamente.
¿Cuantos años llevaba así con Shige? prácticamente
desde que eran unos crios. El sexo con él era genial, así como su compañía, sus
viajes juntos.. y su forma de complementarse.. pero ¿y qué más? sentía que le
faltaba algo que su amigo no parecía estar dispuesto a darle; una estabilidad
en su relación, pero ni siquiera podían considerarse novios a pesar de todos
esos años.
Suspiró pesadamente mirando hacia la ventana;
llovía... era el día de su cumpleaños y estaba lloviendo. Dejó la bandeja a un
lado y se acurrucó en la cama tapando bien su cuerpo desnudo con las sabanas. Comenzaba
a sentir que lo suyo con Shige realmente no iría a más.
-¿Ya te has duchado? qué rápido.- rió un poquito
cuando la visión del cuerpo desnudo de Kato se presentó ante sus ojos.
-¿Y tu qué? ¿lo has pensado ya?- se acercó
abrazándole, acomodándose en su espalda y comenzando a acariciar lentamente el
brazo de su amigo.
-Uhm... en realidad.. esperaba estar casado a los
30 años.. o estar a punto de hacerlo al menos- sonrió algo avergonzado, y en
ese momento sintió como Shige se tensada y detenia esas caricias.
-¿Casado?- Koyama seguía con esa idea; él quería
formar una familia.. aun cuando ellos llevaban años acostándose, cuando creía
que tenían algo especial, él seguía con esa idea.
-Uhm.. nee Shige.. esto
algún día se acabará, somos adultos ¿no? no podemos jugar toda la vida.- le
dolía decir esas palabras, por eso prefirió no encararle y quedarse de espaldas
a él.
Kato se quedó en silencio. No esperaba para nada
que Keiichiro le dijera aquello, que sacara ese tema justo ese día.. después de
haber pasado la noche juntos y haber despertado abrazados entre las sabanas
impregnadas de aquella pasión. Así era.. Koyama quería casarse, pero se negaba
a pensar que su amigo algún día cortaría con esos encuentros.
-Pero hasta que eso pase.. aun queda mucho
¿verdad?- rió un poquito, tomándoselo en parte como algo que no iba a ocurrir,
engañándose a si mismo.
Sonrió calladamente ante la pregunta de Kato.
Esperaba oírle decir que no pensara más en eso, que estaba enamorado de él..
pero no era así. ¿Entonces qué hacia con él? solo jugar.. engancharse cada vez
más a esa adicción y alejarse de su idea de formar una familia.
-Tengo que ir a trabajar, iré a la ducha..- se
levantó de la cama soltándose de aquel abrazo. -gracias por mi pequeño pastel
de cumpleaños.- besó la frente el más joven y se alejó ocultando enseguida
aquel nudo en su garganta.
*********
Llegaba tarde al trabajo, había pillado trafico
esa mañana por culpa de un accidente con la lluvia, y aunque había avisado para
que lo supieran, se daba por los pasillos toda la prisa que podía.
-¡Ah! ¡lo siento! ¿estas bien?- había chocado con
alguien haciendo que esa persona cayera al suelo así como sus papeles.
Cuando la miró pudo reconocerla. Era una de las
chicas que trabajaba en la dirección del News every, y aunque nunca habían
cruzado palabra, siempre le había llamado un poco la atención por su aspecto;
realmente era una mujer muy bonita.
-Podrías mirar por donde andas ¿no? mira, ¡está
todo por el suelo!- le refunfuñó algo molesta, iba tarde esa mañana.
Comenzó a recogerlo todo, pero enseguida Koyama se
agachó a su lado ayudándola... en ese momento, ella le reconoció dándose cuenta
de quien había sido el tonto que había tropezado con ella.
-De verdad lo siento..- sonrió algo nervioso y la ayudó
a levantarse ofreciéndole los papeles. –no se si estarán ordenados.-
-Gracias...- los cogió y suspiró resignada ¡se lo
había desordenado todo! -tengo prisa.- fue a marcharse, pero Koyama la detuvo.
-¿Qué puedo hacer por compensarte?- le preguntó encontrándose
con la mirada de la chica. -Kana-san ¿verdad?- ella se sorprendió de que
supiera justamente su nombre. -te llaman así ¿no? Perdona por tomarme tantas
confianzas, pero no se tu apellido.- sonrió llevándose una mano tras la nuca.
-Kana-san está bien...- suspiró nuevamente, y
poniéndose bien las gafas, se dio media vuelta dispuesta a marcharse. -tengo
prisa, y tu también deberías tenerla ¿no? te están esperando en plató.-
-¡Ah! ¡claro! ¡Lo siento!- hizo una reverencia y
salió corriendo hacia el plató con la esperanza de no chocarse con nadie más..
pero entonces, se llevó la mano al pecho sonriendo tontamente.
Las horas pasaron.. y cuando la grabación
acabó, el staff sacó una tarta de
cumpleaños con sus 30 velas. Le costó un poco soplarlas y bromearon con que ya
eran muchas.. pero mientras comían el pastel animadamente, Keiichiro vio a
aquella chica con quien había tropezado en la mañana.
-¿No comes tarta?- le preguntó ofreciéndole un
trozo cuando se acercó a ella.
-No, ya me marchaba, feliz cumpleaños.- le
sonrió... y ante ese gesto, Koyama se quedó embobado por un segundo.
-Ten una cita conmigo.- le propuso sin más, sin
siquiera saber si ella tenia pareja o estaba casada.. -ah.. lo siento por ser
tan directo..- se disculpó cuando Kana se giró a mirarle completamente
sorprendida. -es que quería invitarte a algo para disculparme por lo de antes,
de verdad lo siento..- había metido la pata.. hacia tanto que no coqueteaba con
una mujer, que había perdido las formas.
-Si de verdad quieres una cita, averigua algo más
que mi nombre.- se giró algo avergonzada, pero dejando ver una sonrisa ante
Keiichiro.
Sonrió tontamente mientras la veía marchar. Lo
averiguaría.. su apellido, su numero de teléfono, su email.. averiguaría más
cosas sobre ella.
**************
Miró la hora una vez más.. habían quedado en verse
después de que Koyama saliera del trabajo, pero era tarde, y él aun no había
llegado.
Suspiró pesadamente; suponía que se habían
entretenido en aquella "fiesta" de cumpleaños en el trabajo.
Keiichiro se había preocupado de mandarle una foto al móvil donde salía junto a
esa tarta de cumpleaños.. eso le hizo sonreír. Verle feliz era lo que más le
gustaba.
De nuevo miró el reloj, y justo cuando más
distraído estaba, tocaron a la puerta haciéndole pegar un salto. Sonrió
tontamente sabiendo quien seria, y enseguida fue a abrir.
-Okaeri~~- le saludó con una amplia sonrisa, pero
Keiichiro solo sonrió suavemente pasando dentro. -¿un día duro?-
-Uhm.. ha sido cansado, pero ha estado bien.- se
sentó en el sofá cerrando los ojos, y Kato enseguida se sentó a su lado.
-¿Cenamos? ¿o te has atiborrado de tarta?- bromeó
recibiendo una mirada inocente por parte de su amigo.
Kato sirvió la cena que había preparado para esa
noche; de algún modo quería celebrar el cumpleaños de su amigo con algo más que
con ese desayuno y una vela en un dulce. Comieron tranquilamente mientras
Koyama le contaba esa pequeña celebración que le había hecho en el trabajo.. en
realidad le había contado todo su día, excepto una cosa.. que le había pedido
una cita a su compañera de trabajo.
-Así que esta cena tenia algo oculto ¿no?- rió
divertido cuando Shige le tumbó en la cama comenzando a desabrocharle el
pantalón.
-Es solo una pequeña forma de celebrarlo..- se
excusó comenzando a levantar la camisa del mayor para besar su abdomen.
-Uhm~~ ¿no
se suponía.. que lo habíamos celebrado anoche?- sonrió encantado con esas
caricias, pero sentía que sus párpados pesaban obligándole a cerrar los ojos.
-Esto sigue a lo de anoche.- deslizó sus dedos
sobre el vientre de su amigo, haciendo que este suspirase.
Sonrió levemente. ¿Así era verdad? solo el juego
de acostarse, el hecho de disfrutar de un sexo realmente delicioso y
satisfactorio.. pero quería más; algo que Shige no parecía estar dispuesto a
darle.
-Shige-chan~~- murmuró en un suave ronroneo, y
cuando soltó las sabanas que había tenido cogidas entre sus dedos, ya no se dio
cuenta de nada más.
-¿Uhm?- Kato el miró mientras recorría aquel
abdomen a besos.. pero entonces se detuvo. -¿Keii?- lo llamó incorporándose un
poquito, entonces se dio cuenta de que su amigo estaba completamente dormido.
-¿se ha dormido?- se preguntó fastidiado, mirando bien aquel rostro calmado..
como la respiración de Koyama era profunda. -baka...- suspiró pesadamente,
sabia que ya no podría despertarlo, así que la celebración terminaba ahí.
Se desnudó y acabó de desnudar a Keiichiro, pero
esta vez solo para taparle bien y acostarse a su lado. Deslizó sus dedos por el
cabello del mayor sin dejar de mirarle. Era raro.. en todos esos años, y
exceptuando aquella vez en NY donde tuvieron que compartir cama forzosamente,
jamás habían dormido en la misma cama sin antes pasar una de esas apasionadas
noches. En realidad, eso de solo dormir no estaba tan mal..
Sonrió suavemente, acomodándose a su lado,
abrazándole incluso.. le amaba.. y realmente quería que pasara algo más entre
ellos.. ¿pero como dar ese paso cuando Koyama no dejaba su idea de tener una
familia atrás? aquello era imposible.
************
Los días pasaban, y todo había seguido igual entre
ambos. Lo había pensado mucho.. la idea de seguir con Shige le encantaba, era
lo que realmente quería.. pero simplemente se había cansado de esperar a su
amigo, de esperar que algo más ocurriera entre ellos y pudieran formalizar su
relación. Después de todo, era una locura.. dos hombres del mundo del
espectáculo como pareja; ¡dos johnnys! seria todo un escándalo, traería
problemas.. así que después de todo, era lo mejor.
Sacó su móvil y un papel donde había anotado días
atrás un numero de teléfono. Lo había conseguido; el apellido y teléfono de esa
chica a quien no había vuelto a ver desde aquel tropiezo en el estudio de
televisión.
Marcó el numero decidido; ¡lo haría! la invitaría
a cenar con la intención de disculparse. Pero detrás de eso, su idea estaba
siendo otra muy diferente.. llegar a conocerla.
-Hola.. ¿Kana-san? soy.. Koyama Keiichiro..-
Bebió otra copa más, sentía ganas de llorar,
sentía que se había equivocado; que quizás hubiera sido más fácil confesarle a
Kato lo que sentía.. pedirle algo más que esos encuentros.. pero no, había
acabado casándose con una chica maravillosa a la que adoraba.. esperando
olvidarse de su mejor amigo, pero las cosas no habían resultado de ese modo.
Cuando pidió la siguiente copa la tomó de una
vez.. pagó, y enseguida se levantó de allí tambaleándose y saliendo del local.
Necesitaba un poco de aire fresco, caminar sin rumbo fijo... lo que tenia claro
es que no quería volver a casa.
Así lo hizo. Caminó y caminó, pero cuando se dio
cuenta, estaba justo frente al edificio donde Shige vivía.. rió irónicamente, y
cuando fue a darse media vuelta para marcharse, algo le impulsó a entrar y
tocar a la puerta.. quería verle, confesarle lo que sentía y decirle que casarse
había sido un error.
********************
Jadeó calladamente al sentir como los labios de
Takumi recorrían su pecho desnudo hasta bajar a su abdomen.. como una vez allí,
las manos de este buscaban abrir su pantalón.
Le miró; ese muchacho era atrevido, al parecer no
le daba ninguna vergüenza andar desnudándolo.. y no podía negar que comenzaba a
sentir cierta impacienta por lo que este parecía tener intención de hacerle.
Tomó aire y alzó las caderas cuando el muchacho
bajó su pantalón junto a la ropa interior, exponiendo su miembro semi erecto.
Entonces comenzó a hacerlo... esos labios se deslizaron por su miembro,
buscando despertarlo.. y Kato solo puso sus manos sobre la cabeza de Takumi
siguiendo los movimientos de este.
Era agradable... después de todo placentero.. pero
comenzaba a sentirse como un idiota por pensar que estaba traicionando a
Koyama. Abrió los ojos y miró el reloj de la mesita.. eran más de las 12 de la
noche, ¿él estaría solo en casa? no.. ¡no podía seguir pensando en él!
Oyó que Takumi le dijo algo y abandonó sus
caricias.. entonces oyó la puerta. Eso era lo que le decía ¿verdad? que
llamaban a la puerta.. ¿quien seria a esas horas?
-¿Vas a abrir?-
-Si, espérame un momento.- se levantó de la cama y
abrochó su pantalón poniéndose también la camisa y dejándola abierta.
Dejó a Takumi en la cama, medio desnudo y con un
gesto resignado.. pero solo iria a ver quien era, escaparía por un momento de
la situación con ese muchacho.. se relajaría, y volvería para pasar la noche
con él.
**********
La puerta se abrió tras insistir, allí estaba
Shige ante sus ojos.. con la camisa abierta y el pelo alborotado.. aun así, no
parecía tener pinta de que le había despertado.
-Keii.. ¿qué haces aquí?- le preguntó al verle, al
encontrarse con esa mirada algo vidriosa. -estas empapado...- Keiichiro solo
sonrió en respuesta y bajó la mirada.
-Lo siento... por venir así sin avisar, pero es
que...- se mordió los labios, tenia ganas de llorar, pero entonces Shige le
tomó del brazo haciéndole entrar.
Le llevó al salón para que se sentara y fue
enseguida a coger una toalla para que se secara un poco.. Koyama se resfriaba
muy fácilmente.
-Aquí tienes, sécate bien o te resfriaras.- se la
pasó y se quedó mirándole un momento.
-Gracias..- Sonrió suavemente en respuesta y se
secó un poco la cara y el pelo, pero sentía que todo le daba vueltas..
Shige se
quedó mirándole fijamente; como examinándolo.. había bebido, de eso se había
dado cuenta nada más verle.. pero lo que de verdad le preocupaba es que se veía
mal, y estaba demasiado callado. Se sentó a su lado y tomándole de la barbilla,
le hizo alzar la mirada hasta dar con ella.
-¿Te ha pasado algo?- ante la pregunta, el mayor
solo negó con la cabeza. -¿has discutido con Kana-san?- por un momento deseó que
fuera eso y poder consolarle... pero no era así.
Koyama negó de nuevo. Quería decírselo, contarle
todo lo que le estaba ocurriendo con respecto a él, encontrar de algún modo una
solución.. después de todo, Kana también estaba metida en aquel lío, y ella era
la que menos culpa tenia.
-Shige, yo...- iba a decírselo, a soltarle que
estaba enamorado de él.. pero entonces, ante sus ojos vio a aquel muchacho
saliendo de la habitación de su amigo.
-Esto.. será mejor que me marche a casa.. mañana
seguiremos con los estudios Kato-sensei..- le sonrió y pasó junto a ellos yendo
a la puerta, al parecer no era el momento..
-Takumi-kun.. espera, debería llevarte a casa.- el
muchacho negó diciendo que se marcharía en taxi, y tras sonreírle, se despidió
saliendo de allí.
-Estáis saliendo ¿verdad?- agachó la cabeza; se
sentía un estúpido por pensar en declararse. -lo siento.. no quería interrumpir
nada.-
-No has interrumpido nada Keii.. no ha pasado nada
entre ese muchacho y yo..- de algún modo sentía la necesidad de excusarse, de
hacerle saber que no habían llegado a más.
Koyama levantó la cabeza, le miró atentamente..
Shige le quitaba importancia, pero todo apuntaba a que él había llegado justo
para interrumpirles. Entonces, si estaban saliendo, ¿verdad?
-Es mucho más joven que tu Shige.. es un crío...-
-Lo se... pero eso no importa.- suspiró sin dejar
de mirarle, quería oírle decir que estaba así por eso; porque le había visto
con ese muchacho.
-Pero...-
-¿Acaso importó que nosotros fuéramos amigos?- sus
palabras salieron con cierta rabia contenida, con algo de rencor incluso.
-¿A qué viene eso Shige?-
-Nada, déjalo..
te llevaré a casa.- no quería discutir, Koyama no estaba en condiciones,
y él tampoco.
-No quiero ir a casa..- le detuvo tomándole de la
mano, haciendo que Kato se girase a mirarle. -quiero.. que me beses..- mantuvo
la cabeza gacha, sintiendo sus mejillas arder más de lo que ya lo hacían por el
alcohol.
Keto se detuvo, le miró abriendo los ojos de par
en par. Había oído bien esas palabras, Koyama le acababa de pedir que le
besara... ¿es que no se daba cuenta de lo que eso suponía? ¿Del daño que le
hacia al pedirle algo así?
-Keii no.. no voy a besarte, estas casado..-
sintió como Keiichiro le soltaba, pero al oír sus sollozos se arrodilló entre
sus piernas tomando sus mejillas para que le mirase. -¿qué demonios te pasa? no
puedo besarte, no lo comprendes? se acabó Keii..- cerró los ojos y susurró
pegando su frente sobre la de su amigo, sintiendo aquella respiración algo
agitada mezclarse con al suya.
Se sentía desesperado, loco por darle ese beso y
sentir ese calor de sus labios.. por volver a tenerle. Finalmente se encontró
con esos ojos... llorosos, brillantes... esa mirada dulce e inocente pero
provocativa al mismo tiempo, esa mirada que le volvía loco. No lo pensó más..
ya no tenia nada más que perder.. asi
que le besó. Tomó aquellos deliciosos labios entre los suyos,
los acarició con ansias, con descaro.. robando los suspiros de su mejor amigo
sintiendo como Koyama alzaba sus manos temblorosas hasta su cuello,
respondiendo a sus besos de igual modo. Aquello se había convertido en una
autentica locura.
Conitnuará..
Pues hasta aqui el capitulo 8! ^^ no se que os habra parecido, y opara eso estoy deseando leer los comentarios ^^ pero al escribirlo, a mi se me hizo un capitulo bastante intenso.. tenia muchas ganas que llegase el momento final del capitulo ^^ soy mala, lo se.. pero este capitulo ha sido más largo que el anterior, eso compensa no?
Bueno, necesitaba meter a Takumi para dar un poco de juego... y el flashback ha sido bastante largo.. me ha gustado mucho escribirlo, pero me ha dado lastima tambien.. y no entrare ahora mismo en la discusión sobre quien de los dos esta siendo mas frio e insensible XD me encanta ver vuestras opiniones sobre eso ^^ y yo lo sigo diciendo.. los dos tienen la misma culpa! pero ya veremos como lo arreglan, si es que lo hacen...
En realidad no tengo nada más que decir aqui, asi que me toca esperar a que lo leais y responder vuestros comentarios ^^ gracias como siempre, espero que este capitulo tambien os haya gustado ^^ y tengo que decir, que queda muy poquito ya, puede que unos 3 capitulos, 4 como mucho.. asi que a ver que pasa! ^^ nos vemos en el siguiente capitulo ^^