Yakusoku "promesa" (capítulo 8)

YAKUSOKU "PROMESA" - Capitulo 8

Autor: Saiikeiilove

Resumen: Massu y Tegoshi se hacen una promesa cuando eran unos niños, 20 años después vuelven a reencontrarse.

Pareja: Teggomass

Genero: Romantico, Drama
Advertencia: lemon en un futuro




Salió corriendo de aquel lugar, había conseguido hacerlo antes de que le pillasen, y cuando por fin se sintió a salvo, se detuvo respirando agitado. Cerró los ojos un momento en un intento por recuperar el aliento... había corrido mucho, y había perdido a Tegoshi de vista.

Massu caminó sin rumbo alguno; solo quería pensar, y sobre todo, no volver aun al apartamento que compartía con Shige. Él y Koyama le habían animado a ir a buscarle, habían impedido que se marchara.. pero también había descubierto algo que preferiría no haber visto.

-¿A eso se dedica?- se preguntó a si mismo bajando la mirada, mordiéndose el labio con cierta rabia.

Solo de pensar que ese chico era su pequeño Tegoshi, ese niño dulce e inocente al que una vez le hizo una promesa... le había encontrado, estaba feliz por ello, pero todo daba vueltas en su cabeza sin saber como ordenar ni sus ideas, ni sus sentimientos en ese momento.

Llegó a un pequeño parque y se sentó en un banco viendo a los niños jugar. Habían pasado 20 años... ¿qué esperaba? ¿que Tegoshi siguiera siendo aquel niño? ¿que la muerte de sus padres, su adopción, y todo lo que suponía que había tenido que pasar, no le hubiera afectado en lo más mínimo? no.. las cosas no parecían haber sido fáciles para Yuya... pero dedicarse a eso... ¿qué era lo que hacia en su trabajo exactamente?

Necesitaba una explicación, que Tegoshi se lo contara.. que le hiciera entender por qué había escogido dedicarse a eso. Al menos había conseguido llegar a una conclusión; no se rendiría, no cuando había conseguido confesarle sus sentimientos. No volvería a dar marcha atrás intentando marcharse.. simplemente conseguiría que Tegoshi volviera a enamorarse de él. 

********************************* 

-¿Entonces te marchas ya?- le preguntó casi con un puchero en sus labios.

-Si.. tengo algo de trabajo, y debo llevar la maleta de Massu a casa...- echó una ojeada a aquella maleta; Kato se había encargado de guardársela mientras Massu iba en busca de Tegoshi. 

-Me pregunto como le habrá ido.. si habrá conseguido ver a Nagisa... digo.. a Tegoshi...- corrigió rápidamente, lo cierto es que se le hacia raro llamarle por su verdadero nombre. -espero que no esté muy enfadado conmigo..- sonrió algo nervioso, y ambos fueron hacia la puerta.

-Hiciste lo que tenias que hacer Koyama.. deja de preocuparte, Tegoshi-kun lo acabará entendiendo.- fue a besarle una vez en la puerta, pero la expresión de Keiichiro cambió a una de pánico. -¿qué pasa?- se giró a mirar, y detrás suya vio a Tegoshi con cara de pocos amigos. 

-¿Podemos hablar un momento?- le preguntó a Koyama completamente serio, manteniéndose allí de pie justo al lado de la escalera. 

-Yo...- miró a Shige antes de responder, y este asintió.

-Bueno, os dejo solos, tengo que volver a casa y sacar unas cuantas fotos que debo entregar.- besó la mejilla del mayor, pero antes de separarse, el susurró al oído. -suerte..-  se separó de él dándole un golpecito en el hombro.

Igualmente se despidió de Yuya, pero este solo se mantuvo mirando a su vecino que parecía temblar a la vez que sonreía tontamente... al parecer Massu había dado con Tegoshi finalmente.

-Esto.. ¿quieres pasar?- le preguntó una vez que Kato les dejó a ambos solos, sabia que Tegoshi debía estar muy enfadado, así como en parte, él se sentía un traidor.

-Si, si que voy a entrar.- se abrió camino entrando descaradamente en el apartamento del mayor, y este cerró la puerta tras él. 

-Iré a preparar un poco de te... así podremos hablar tranquilos...-

-¿Por qué se lo has contado?- le preguntó antes de que Keiichiro pudiera siquiera moverse. -te pedí que lo mantuvieras en secreto, ¡Massu no tenia que saberlo!- 

-Lo se.. y lo siento...- bajó la mirada sintiéndose culpable.. ¡pero ellos tenían que darse una oportunidad!

-Me da igual que lo sientas o no ¡había confiado en ti! ¡pensaba que eras fiable! pero no ha sido así.. ¡se lo has contado todo! y la has jodido haciéndolo.- le recriminó aquello, pero entonces Keiichiro le miró fijamente.

-Massu iba a marcharse al extranjero de nuevo, por eso se lo conté.- le explicó consiguiendo que Yuya se sorprendiera por ello. -es cierto que te he traicionado, que confiaste en mi y he faltado a mi palabra.. ¿pero hubiera estado bien dejar que se marchara sabiendo que tu eres esa persona a la que tanto ha buscado? pensé que no.. por eso se lo conté, para que no se marchara, y para que te dieras una oportunidad a ti mismo de arreglar lo que sea que haya ocurrido con él.- ante tal explicación, Yuya se vino un poco abajo, y por un momento no supo que decir. -os conocéis desde la infancia.. aun guardabas esa foto... ¿tan grave es lo que ocurrió para que no quieras ni verle a pesar de saber que era él?- le preguntó acercándose al más joven, poniendo sus manos sobre los hombros de este. 

-No.. no es tan fácil..  tu no lo entiendes...- apretó los puños con rabia ¡eran demasiados sentimientos! algunos a los que temía especialmente. -Massu no podía enterarse.. ¡él rompió su promesa!- si, aquel resentimiento había ido creciendo con los años, con los problemas.. hasta convertirse en algo que creía imperdonable. 

-¿Es por eso? ¿por una promesa? de eso hace 20 años.. erais unos niños... ahora sois dos personas adultas que os habéis vuelto a encontrar, podéis arreglar las cosas.- alzó el rostro de Yuya cuando este bajó la mirada mordiéndose el labio.

-Las cosas se han complicado más.. él ahora sabe a que me dedico..- murmuró sin atreverse a mirar a Koyama. 

Keiichiro se quedó en silencio por un segundo ¿qué tenia de malo su trabajo? era una productora ¿no? él mismo le habia dado la tarjeta a Massu para que le encontrara. 

-Se te cayó... una tarjeta cuando sacaste aquella foto para enseñármela.. ya te habías marchado, así que la guarde.. y esta misma mañana se la di a Massu.- ante aquello, Tegoshi alzó la mirada sin poder creerlo.. 

-¿Fuiste tu?- Keiichiro solo asintió sin comprender que tenia de malo. -¡pues gracias de nuevo! como ya te he dicho ¡la has jodido pero bien!- se separó del mayor, y sin nada más que hablar, salió de allí pegando un portazo.

-¿Qué.. tiene de malo esa tarjeta?- se preguntó a si mismo sin entenderlo, aunque lo mejor era dejar que Yuya se calmara un poco. 

************************************ 

Estaba trabajando en su estudio de fotografía, en esa pequeña habitación que había destinado para revelar aquellas fotos que hacia tanto por trabajo como por hobby, cuando oyó el timbre de la puerta sonar.

Miró la hora; era bien entrada la tarde... y lo cierto es que no había sabido nada de Massu en todas esas horas.. aun así, Koyama le había llamado contándole el problema con Tegoshi; lo cierto es que no parecía haber sido tan grave como pensaba, pero su novio andaba como tonto lloriqueando por los rincones repitiendo que había traicionado a Tegoshi.  Abrió la puerta, y cuando vio que era Massu, se quedó más tranquilo. 

-Por fin llegas, me habías preocupado.- le dejó pasar, Massu no se veía muy animado a decir verdad. -¿como ha ido? le has encontrado ¿verdad?- eso ya lo sabia, no por nada Tegoshi había querido hablar con Koyama hecho una furia. 

-Uhm.. conseguí dar con él.. en su trabajo...- se sentó llevándole las manos a la cabeza.

Kato se sentó a su lado, puso una mano sobre la espalda del mayor, y la acarició en un intento por reconfortarle.

-¿No ha ido bien?- se atrevió a preguntar finalmente. 

-¿Podríamos dejar el tema por hoy?- le miró con una leve sonrisa en sus labios, y Kato asintió. 

-Está bien, pero si necesitas algo no dudes en llamarme.- Massu asintió levantándose de allí. -tu maleta está en tu habitación... vas a quedarte ¿verdad?- Masuda asintió en respuesta. 

-Iré a tomar un baño, buenas noches Shige, y gracias por todo lo de hoy.- le sonrió de nuevo y fue directo a su habitación, solo quería relajarse, pensar un poco.. tenia que conseguir acercarse de nuevo a Tegoshi y hablar con él tranquilamente. 

**************************** 

-Buenos días.- le saludó con una amplia sonrisa cuando Yuya abrió la puerta.

-¿Qué quieres?.- preguntó malhumorado; con el cabello revuelto y el pijama algo descolocado.

-He venido a traerte el desayuno~~  café, tostadas recién hechas, y zumo de naranja.- le mostró la bandeja, y el más joven le dio una mirada recelosa.

-¿Eso es para comprar mi perdón? no lo quiero.- fue a cerrar, pero Koyama le impidió hacerlo.

-¡Espera! ¡solo quiero disculparme! pensé que igual si te preparaba el desayuno.. podría venir a tu casa con esa excusa..- le confesó bajando la mirada.

Tegoshi se quedó mirándole.. ¿como podía ser tan tonto? ¿de verdad se había molestado en prepararle el desayuno solo para tener una excusa con la que ir a llamar a su puerta y disculparse? no pudo evitarlo y se echó a reir ante la mirada sorprendida del mayor. 

-Pasa, pero está todo algo desordenado...- Koyama entró felizmente, pero al hacerlo, efectivamente, todo estaba por medio.

-¿Cuanto hace que no limpias aquí?- le preguntó sorprendido por esa montaña de ropa sobre el sofá.

-¿Has venido a ganarte mi perdón o a juzgar la limpieza de mi casa?- se cruzó de brazos frente al mayor, y este solo rió nervioso.  -¿sabes qué? da igual..- Koyama le miró sorprendido cuando Yuya dijo aquello. -no gano nada enfadandome contigo.- se sentó pesadamente en el sofá, y Keiichiro se sentó a su lado.

-Aun así.. lo siento.. no soy del tipo de personas que traiciona a sus amigos..- ante aquello, Tegoshi le miró con cierta ironía. -no.. me mires así.. lo hice porque..-

-Porque Massu se iba a marchar..- murmuró soltando un profundo suspiro mientras  Koyama le miraba sin saber bien que hacer.. si debía preguntar más o simplemente volver a disculparse. -debisteis dejar que se marchara.. ahora todo se ha vuelto más complicado..- y todo porque precisamente Massu debía haber descubierto ya cual era su trabajo.  

********************************** 

-Massu.. ¿no vas a salir de tu habitación en todo el día?- volvió a preguntar Shige tocando a la puerta por tercera vez en lo que llevaban de mañana. 

-Aun no.- le contestó al otro lado.

Kato suspiró pesadamente y se volvió a su trabajo. Massu no había salido de allí desde la noche.. no había hablado con él, no había aceptado nada de comida.. eso le preocupaba. ¿Pero qué más podía hacer? solo esperar a que quisiera salir.

Sus ojos seguían clavados en la pantalla de su ordenador.. ¡aun no podía creerlo! ¿como es que ese niño había acabado en algo así? lo había visto la tarde anterior en pleno rodaje de lo que parecía ser una de esas películas X.. pero no había acabado de creerlo, hasta que en la madrugada cansado de dar vueltas en la cama, tomó valor y buscó en Internet información sobre aquella productora.

Efectivamente, se trataba de una productora de películas X de temática homosexual.. en la cual Tegoshi Yuya parecía ser la principal estrella. Por supuesto había sido incapaz de ver tan solo una imagen, ¡menos una de ellas! tan solo el simple hecho de pensar que la persona de la que se había enamorado dos veces, se dedicaba al porno gay, le descolocaba por completo. 

-¿Qué puedo hacer?- se preguntó a si mismo, soltando un leve suspiro mientras sus ojos enrojecidos seguían clavados en la pantalla.

¡Tenia que hablar con Tegoshi! ir a buscarle, ¡reclamarle una explicación! y sobre todo, ganarse su confianza. Apagó el ordenador, y por fin salió de la habitación yendo a asearse un poco.

-¿Massu?- Shige asomo enseguida al cabeza por la puerta, había estado pendiente de que Masuda saliera durante toda la mañana.  -por fin has salido.. oye, ¿estas bien?-

-Si.. necesito salir un momento.- fue a coger su abrigo y sus cosas, ¡hablaría con Tegoshi! asi tuviera que llevarse hasta la mañana siguiente en ello.  

-Ve con cuidado..- solo pudo decirle aquello y dejar que se marchara, solo esperaba que estuviera bien.

**************************** 

Habia acabo contándole todo a Koyama; parte de su infancia con Massu, como este le hizo una promesa y se marchó sin volver de nuevo.. y como había aparecido 20 años después enamorándose de "otra persona". 

Koyama le había escuchado atentamente.. a Yuya parecía costarle hablar de aquello, se le notaba demasiado resentido con Massu, y aunque parecía ser una tontería, esa promesa y la partida de Masuda cuando eran unos críos, parecían haberse clavado profundamente en su corazón.. todo apuntaba a que aquello era un amor de infancia y que los sentimientos aun seguían vivos en alguna parte. 

-Tego-chan, tu.. ¿estas enamorado de él?- se atrevió a preguntar tras oír aquella historia.

-¿Que?- le miró sorprendido por esa pregunta, sintiendo sus mejillas arder.. -claro.. claro que no.. ¿como voy a estar enamorado de una persona a la que ni conozco?- se levantó poniéndose algo nervioso; era cierto.. ya no conocía a Massu; no como cuando eran unos críos. -ademas, es un hombre...-

-¿Un hombre? ¿eso.. es un problema para ti?-  ante aquella pregunta, Yuya desvió la mirada.

¿Como iba a decirle a Koyama que sentía asco hacia los gays? ademas.. con Koyama no era lo mismo.. a pesar de que su pareja fuera otro hombre, no sentía asco hacia ellos.. era algo diferente. 

-No me gustan los hombres..- murmuró sintiéndose realmente irónico; ¡su trabajo consistía en acostarse con hombres!

-Deberías hablar con él..-

-¡No quiero!- respondió poniéndose de nuevo a la defensiva.

-¿Por qué no? -

-¡Porque ahora Massu sabe donde trabajo y no quiero verle!- lo había dicho en voz alta.. sentía vergüenza, y todo porque Massu le había descubierto...

-¿Y que tiene eso de malo? no entiendo por qué tanto misterio con tu trabajo... ¿qué tiene de malo trabajar en una productora?- ambos se miraron tras aquella pregunta, pero antes de que Yuya pudiera responder algo, tocaron a la puerta. -la puerta..-

-La he oído..- murmuró yendo a abrir... ¿quien más que su vecino podía ir a molestarle? -Massu...- susurró al verle ante sus ojos. 

-Hola...- saludó tímidamente sin saber muy bien como actuar después de lo ocurrido el día anterior.

-¿A qué has venido?- de nuevo aquella actitud defensiva.. seria, firme.. pero por un momento sintió como si le temblaran las piernas. 

-Yo.. quería hablar contigo.. y no me digas que no tenemos nada de que hablar porque sabes tan bien como yo que hay mucho.- le advirtió antes de que Tegoshi pudiera siquiera abrir la boca.

-Esto.. yo tengo que marcharme...- interrumpió Koyama saliendo de allí ante la mirada algo sorprendida de Massu. -nos vemos chicos..- y rápidamente se metió en su casa sacando su móvil para llamar a Shige.

-¿De que quieres hablar?- Masuda se sobresaltó al oir a Tegoshi, pero más se sorprendió al ver como el más joven parecía tranquilo sin siquiera sostenerle la mirada.

-¿Podemos.. hablar dentro? ¿o ir a algún lugar? no quiero que vuelvas a acusarme de que te acoso..- rió un poquito, pero la broma no parecía haber tenido gracia.

-Entra, pero solo un momento.- 

-Si.. gracias..- le sonrió levemente, provocando que Yuya desviase la mirada rápidamente.

Entró tras él y cerró la puerta seguidamente. Ya estaba allí.. había conseguido dar ese pequeño pasito.. pero de lo que se había dado cuenta, era de que cada vez que Tegoshi se veía acorralado, él intentaba huir, y esta vez, no quería asustarle..


Continuará... 





Pues aqui está el ultimo capitulo del año! asi que os dejo un poquito de intriga para el año que viene ^^
Bueno, tengo que decir que he escrito este capitulo con el tiempo bien justito.. pero prometí subirlo antes de que acabara el año y aqui está, aunque haya sido un capitulo un poco suave.. ya vendrá el siguiente que prometo que será mucho más interesante ^^

parece que Tegoshi se ha ablandado un poquito.. no ha sido tan malo con Koyama verdad? no era mi intención hacer que le odiase, solo que se enfadase un poquito ^^u   por otro lado, Massu se ha decidido a hablar con él y ver si puede solucionar las cosas, ahora están los dos solos y tranquilos.. qué pasará? siento haberlo dejado aqui, pero subiré el siguiente en cuanto pasen ya todas las fiestas y tenga un poco de tranquilidad y tiempo! asi que un poco de paciencia esta vez  ^^

Sobre todo, gracias por los comentarios y los animos para escribir, de verdad estoy muy agradecida a todas las que os detenéis un par de minutos a dejarme un comentario, espero que este fic os guste hasta el final ^^   y ahora si.. ya me despido hasta el año que viene.. asi que tengáis buena salida y entrada de año!  (y yo espero entrar el año ya curada completamente de mi maldito resfriado que no hace mas que resistirse a irse..)

Feliz año!!!!  y nos vemos en el siguiente capitulo ^^

Yakusoku "promesa" (capítulo 7)

YAKUSOKU "PROMESA" - Capitulo 7

Autor: Saiikeiilove

Resumen: Massu y Tegoshi se hacen una promesa cuando eran unos niños, 20 años después vuelven a reencontrarse.

Pareja: Teggomass

Genero: Romantico, Drama
Advertencia: lemon en un futuro



Su mirada estaba perdida en todas esas personas que pasaban ante sus ojos, en aquellos que iban y venían por aquel aeropuerto. Miró de nuevo su billete.. ¿estaba haciendo lo correcto? marcharse era lo mejor, no podia seguir buscando a ese niño, y menos aun podía intentar algo con Nagisa. 

-Aunque sea algo cobarde, es lo mejor..- suspiró pesadamente y resbaló un poquito en la silla.

Cerró los ojos, apenas se había despedido de Shige y Koyama.. solo esa llamada telefónica y una nota en el apartamento explicándole a Shige bien la situación.  Abrió los ojos al oir la llamada de su vuelo, se levantó para ir a embarcar, pero entonces, oyó gritar "Massu" justo desde la entrada del aeropuerto.

-¡¡¡Massu!!! menos mal.. menos mal que aun no te has marchado..- le dijo Shige jadeando por la carrera, sonriendo satisfecho por eso.

-Chicos.. ¿qué hacéis aquí?- les preguntó al ver a ambos completamente agotados.

-¿Como que qué hacemos aquí? ¡no puedes marcharte así sin más!- ante el regaño y la preocupación de Keiichiro, Masuda solo desvió la mirada.

-Si que puedo.. ya no tengo nada que hacer aquí.. he sido un idiota por pensar que podía encontrar a esa persona.. y aun más idiota por enamorarme de Nagisa-kun...- murmuró sintiéndose avergonzado por eso. -por eso tengo que marcharme.. no pinto nada aquí.- cogió su maleta, pero Shige le detuvo.

-¡Te equivocas! ¡si que pintas! ademas, no puedes marcharte ahora..- Kato le miró algo serio, y seguidamente miró a Koyama.

-¿Por qué no puedo marcharme?- 

-Koyama dicelo.-

-No.. no puedo Shige.. si lo hago, ya no confiará en mi.- temía que eso ocurriera, que Tegoshi sintiera que le había traicionado.. pero por otro lado estaba Massu.

-¿Decirme qué?- no entendía nada.. algo estaba ocultando Koyama, y queria saberlo. -¿qué está pasando?- preguntó a ambos, y entonces Shige puso su mano sobre el hombro del mayor.

Tomó aire.. Shige tenia razón, tenia que contarle a Massu lo que sabia, evitar que se marchara.. y con eso, darle la oportunidad a Tegoshi de arreglar con él lo que fuera.

-Ya.. has encontrado a esa persona que buscabas, Massu.- ante esas palabras, Masuda abrió los ojos de par en par. -Nagisa.. en realidad se llama Tegoshi Yuya.- le confesó sin dejar de mirarle firmemente.

Massu guardó silencio, intentando digerir esa información, pensando.. tratando de comprender la situación, ¡pero no lo comprendía! ¿como es que Koyama sabia eso? ¿acaso.. Tegoshi si le había reconocido? claro.. le había dado su verdadero nombre.. y ese diminutivo "Massu", el mismo que Tegoshi le había puesto cuando se conocieron.

-No puede ser..- murmuró sin poder creerlo. 

-Él mismo me lo contó hace unos dias.. me enseñó una foto antigua, de dos niños; uno de esos niños era él, y el otro eras.. tu..- 

-Entonces.. ¿él lo sabia?- ante esa pregunta, tanto Shige como Koyama asintieron. 

Massu volvió a sentarse.. sentía su corazón latir acelerado, como sus piernas temblaban sin poder sostenerle en pie. Al final le había encontrado, ¡se había enamorado dos veces de la misma persona! pero Tegoshi no quería verle.. ¿quizás por resentimiento? ¿porque él aun se acordaba de esa promesa de que volvería a buscarle? 

-Massu..- Shige le llamó temiendo que se sintiera mal, pero Masuda alzo la mirada para verles.

-Necesito verle, tengo que hablar con él como sea.- por supuesto que ya no se marcharía, ¡no en ese momento! cuando había encontrado a Yuya.

-Ten esto.. esta tarjeta se le cayó a Tegoshi al sacar al foto.. creo que es el lugar donde trabaja, si no está en su apartamento, ya sabes donde buscarle.- Massu asintió cuando Keiichiro el dio aquello, y rápidamente fue a salir de allí para ir en su busca.

-¡Massu! vamos contigo, tengo el coche ahi fuera.- le dijo Kato con una sonrisa, y Massu le miró asintiendo.

************************* 

-¿Entonces saldrás conmigo?- ante aquella pregunta, Yuya levantó la mirada.

Miró a ese hombre, a su compañero de rodaje, a aquel que le habia "salvado" de Massu  esa noche en el local. No lo podía creer.. ¿le estaba pidiendo una cita? ¿es que se había creído eso de que estaban juntos?

-No estoy interesado en tener una cita contigo.- le dijo tranquilo.. no era la primera vez que le ocurría eso en el trabajo despues de todo..

-¿Y por qué no?- se sentó junto a Tegoshi, pasando su brazo sobre los hombros de este. -se puede decir que ya nos conocemos en la cama, ¿no?- sonrió algo provocativo, y sus labios se acercaron peligrosamente al cuello de Yuya.

-No nos conocemos en la cama, es solo trabajo.- fue a levantarse, pero aquel hombre le tomó fuerte de la muñeca haciendo que se volviera a sentar.  -¿qué haces? me haces daño, ¡suéltame!- forcejeó, pero claro, ese tipo era casi 3 veces más grande que él en cuerpo.

-Si que te gusta resistirte.. pensaba que era solo un papel en el rodaje, pero ya veo que no.- sonrió, y empleando su fuerza, dejó a Yuya tumbado en el sofá bajo su cuerpo..

Por un momento se vio acorralado... otras veces había bastado con una negativa y punto, pero ese hombre no se conformaba con un "no" como respuesta. Sentia ese cuerpo acorralando al suyo.. asi que sin pensarlo, le dio un buen rodillazo en la entrepierna haciéndole gritar y soltarle.

-Si te digo que no, ¡es que no!- salió rápidamente de la sala sintiendo su corazón latir acelerado, lo cierto es que se habia asustado.. pero lo peor es que ya les estaban llamando para grabar. 

***************************** 

Tocó a la puerta repetidas veces, pero nadie habría, definitivamente, Tegoshi no estaba en casa. Massu apretó los dientes, y finalmente miró aquella tarjeta que Koyama le había dado..  la dirección de una productora en el centro de Tokio.

Se dio media vuelta decidido ante la atenta mirada de Kato y Keiichiro. ¡No podía esperar a que llegase a casa! tenia que verle en ese preciso momento. 

-Massu.. ¿no quieres que te acompañemos?- le preguntó Kato algo preocupado.

-No.. prefiero hacerlo solo.. gracias por todo chicos..- 

-Ya.. no te marchas, ¿verdad?- ante aquella pregunta, Massu miró a Koyama con una leve sonrisa.

-Ahora no puedo marcharme.- le aseguró dejando a ambos un poco más tranquilos sobre eso. -voy a arreglar todo esto.- 

-¡Suerte!- gritaron ambos mientras Masuda se alejaba. 

-He hecho.. lo correcto, ¿verdad?- Koyama se mordió el labio, habia traicionado a Tegoshi despues de todo..

-Claro, veras como lo arreglan y te lo agradece incluso.- le abrazó intentando animarle, entrando seguidamente en el apartamento del mayor.

******************************* 

Massu se detuvo frente al edificio una vez que encontró el lugar. Había tardado casi dos horas en encontrarlo, pero allí estaba.. dispuesto a dar con Tegoshi.

Entró tras tomar una profunda bocanada de aire. El lugar era grande, solo tenia que encontrar el numero de oficina que figuraba en la tarjeta. ¿Asi que Tegoshi trabajaba en una productora? aquello no lo hubiera imaginado nunca.. más bien siempre había creído que Tegoshi acabaría siendo un futbolista profesional.

Se detuvo frente a un panel donde indicaba cada planta, cada oficina.. y cuando dio con la que buscaba y fue a tomar el ascensor, alguien le detuvo..

-Disculpa, no puede pasar, este edificio es privado.- le dijo una chica a sus espaldas.

-Ah.. lo siento.. solo buscaba a alguien... en realidad..- miró la tarjeta, ¡tenia que pensar en algo rápido o no le dejarían entrar! -me han citado en esta oficina.- le mostró la tarjeta, y extrañamente, la chica se sonrojó tras mirarle de arriba a abajo..

-Lo siento.. puede pasar, es en la planta 7 a la izquierda.- le indicó haciendo una reverencia.

-Gracias.- sonrió triunfante, y rápidamente tomó el ascensor hacia el lugar indicado.

Las puertas se abrieron, caminó en la dirección donde la chica le había indicado, y tras dar con el numero de oficina que se indicaba en la tarjeta, tocó a la puerta algo asustado. Estaba seguro que se encontraría de cara con Tegoshi, pero no fue asi..

Un hombre alto abrió la puerta, algo serio... le miraba con cara de muy pocos amigos, hasta que le preguntó secamente que hacia alli.

-Busco a una persona.. Tegoshi Yuya... trabaja aqui ¿verdad?- preguntó algo asustado, y ese hombre le miró algo extrañado.

-Tegoshi-san está trabajando, no puedes verle ahora, asi que márchate.- se dio media vuelta, pero Massu insistió.

-¡Pero tengo que verle! por favor, necesito hablar con él, ¡es algo urgente!- le miró serio pero de nuevo obtuvo la negativa de ese hombre. 

-He dicho que te marches o llamaré a seguridad.- le amenazó enseguida.. quizás lo mejor seria esperar a que Tegoshi saliera.

-Si.. disculpe las...- fue a salir, pero entonces vio otra puerta al fondo de la sala.. ahi estaba Tegoshi ¿verdad? -...molestias... pero.. ¡necesito verle!- echó a correr, tenia que verle como fuera..

-¡Oye tu! ¡no puedes entrar ahi!-

*********************** 

-¿Qué demonios te pasa hoy Tegoshi?- le regañó el director ya desesperado.

Yuya le miró algo molesto; simplemente no le apetecía tener que acostarse con ese tipo que acababa de acosarle, ¡asi fuera trabajo! 

-¿Es que necesitas algo de tiempo, pequeño?- le preguntó su compañero de reparto acariciándole la barbilla. 

Tegoshi le miró con rabia, pero sabia que tenia que contenerse en el trabajo.. asi era ese mundo, se tendría que dejar hacer por ese tipo una vez más, ¡excitarse sin quererlo! ¡sin desearle lo más mínimo! aquel asco comenzaba a afectarle en el trabajo.

-Estoy bien..- no le quedaba de otra.. solo tendría que grabar esa escena y acabaría con ese tipo. -sigamos.- volvió a tumbarse en la cama, entre las sabanas revueltas dejando de su cuerpo poco a la imaginación.. y ese hombre aprisionándole sin dejarle escapatoria.

-Vamos a seguir, esta vez espero que salga la toma.- le advirtió el directo, pero justo entonces, la puerta se abrió de par en par. -¿qué cojones pasa ahora? ¡estamos grabando joder!- gritó estrellando el guión contra el suelo..

Habia conseguido entrar... abrir esa puerta. Oia al hombre detrás suya discutir diciendo que no habia podido hacer nada por evitar que entrara.. pero lo que de verdad le impactó en ese momento, fue encontrarse con tal escena;  y con la mirada de espanto de Tegoshi clavada en él...

-Massu...-  murmuró sin saber que hacia él alli, sin entender nada... solo rezando para que eso no fuera verdad. 

-Lo siento yo.. solo quería.. hablar contigo, Yuya...- sonrió, agachó la cabeza, y se dio media vuelta saliendo de alli rápidamente.

Tegoshi se quedó mirándole.. sintiendo como su corazón se sobresaltaba al oirle llamarle por su verdadero nombre.. entonces, ¿Massu lo sabia? ¿sabia quien era? ¡y le habia descubierto de ese modo! 

-Mierda...- se escapó de entre los brazos de ese tipo, y a pesar del enfado del director, se puso su albornoz rápidamente... tenia que alcanzarle.

********************* 

Estaba dándose toda la prisa que podia en salir de ese lugar, pero aquella imagen de Tegoshi desnudo siendo acorralado por ese hombre frente a esas cámaras y personas, no se le iba de la cabeza.

-¿De qué demonios va todo esto?- se preguntó a si mismo revolviéndose el cabello.

Se detuvo un momento tomando aire, no quería mirar atras, ¡no quería volver a encontrarse con esa escena! con Tegoshi;  ese niño que le había robado el corazón.. con Nagisa; la persona que había vuelto a robárselo 20 años después. ¡Ellos dos resultaban ser la misma persona! finalmente le habia encontrado, pero jamas pensó que lo haría de esa forma.

-¡Oye tu!- oyó gritar desde el fondo del pasillo, pero sin atreverse a mirar atras siguió caminando. -joder.. ¡¡¡Massu!!!- chilló con todas sus fuerzas haciendo que este por fin se detuviera. 

No pudo hacer otra cosa más que detenerse.. tomar aire y apretar sus puños hasta que sintió a Yuya a su lado.  

-¿Qué.. qué quieres?- le preguntó sin atreverse a mirarle, sintiéndose nervioso ante aquella situación tan extraña.

Por un momento Tegoshi no supo que decir. Ni siquiera sabia por qué habia salido corriendo tras él; si era por lo que Massu habia visto, o simplemente por el hecho de que él supiera quien era en realidad. 

-Yo...- desvió la mirada, pero entonces Masuda le encaró enfadado.

-¿Por qué no me contaste quien eras? si lo sabias.. ¿por qué me lo has ocultado?- le reclamó sintiendo como su corazón latía acelerado, intentando controlarse.. pero se sentía totalmente frustrado en ese momento. 

Yuya alzó la mirada viéndole. Asi que Koyama se lo había contado ¿no? ¿quien más podría haberlo hecho? sonrió algo irónico; tener amigos para eso.. ¿para ser traicionado? pero lo que no entendía era como Massu habia dado con la productora. 

-¡Porque tu te olvidaste de mi!- le gritó enfadado, dolido... consiguiendo con aquello descolocar a Masuda.

-Yo.. no me olvidé de ti... no lo he hecho durante estos 20 años.- le respondió calmado, y por un momento, se fijó en la blanca piel que asomaba entre el albornoz.

Tegoshi se cubrió bien enseguida tras percatarse de aquella mirada, sonrojándose.. pero no dejaría que Massu le engañara, ¡que se pusiera en buen lugar! ¡él le habia abandonado!

-¡Mentira! ¡dijiste que volverías!.-

-Y lo hice, estoy aqui...- por un momento, Yuya le miró sintiendo sus mejillas arder, asi como sus ojos a punto de llorar. 

-No..  no vengas a decirme que has vuelto para buscarme ¡porque no me lo creo!- negó con la cabeza, aquello era una maldita broma del destino, ¿Massu no podía aparecer y poner su vida patas arriba! -si hubieras vuelto por Tegoshi, hubieras dejado en paz a Nagisa.- 

-Eso.. no tiene nada que ver.. sois la misma persona, ¿es que no lo comprendes?- 

-¿Y si no hubiera sido yo? ¿y si Nagisa realmente hubiera sido otra persona? te habrías olvidado de ese niño,  ¿no es asi?- ante aquella pregunta, Massu no pudo hacer más que guardar silencio.. 

-Yo..- se mordió los labios; Tegoshi tenia razón.. de hecho, habia decidido volver a Los Ángeles y olvidarse de todo.. precisamente por haberse enamorado de Nagisa. 

-¿Ves? tu mismo me das la razón..- le miró con rencor, con cierto odio incluso, pero cuando fue a marcharse, Massu volvió a hablar.

-Tienes razón.. yo.. me he enamorado de Nagisa..- en ese momento se encontró con la mirada completamente sorprendida de Yuya, y aunque tenia miedo de confesarle aquello, ya no tenia más que perder. -¡pero sois la misma persona! el niño del que me enamoré hace 20 años y la persona de la que estoy enamorado ahora, ¡eres tu! ¿qué más da que usaras un nombre falso? estoy aquí por ti.. porque quiero disculparme con Tegoshi, y quiero intentar acercarme a Nagisa..- le dijo aquellas palabras con toda la sinceridad que podía, atreviéndose a declararse, a dejar al aire sus sentimientos.. y a exponerse a ser rechazado. 

Tegoshi le miraba... aquellas palabras estaban a punto de convencerlo, ¡pero no era tan fácil! aunque se olvidase del pasado y decidiera darle una oportunidad a Massu, ¡las cosas no eran así de simples! aquello no era un cuento de hadas, si no la más cruda realidad. 

-Solo te pediré algo.. olvídate de mi, de Tegoshi y de Nagisa.. yo no...- se sobresaltó cuando Massu avanzó hacia él, y cuando se quiso dar cuenta, los dedos de Masuda acariciaban su mejilla...  -.. no puedo.. corresponderte..- susurró aquello a medida que los labios del mayor se acercaban a los suyos... 

-Deja al menos que lo intente..- le susurró casi rozando esos labios que ya ahbia besado una vez... 

Tegoshi sentía su corazón latir acelerado, calor en todo su cuerpo, y como la respiración suave de Massu se mezclaba con la suya.. pero cuando cerró los ojos esperando ese beso, alguien al fondo del pasillo gritó haciendo que ambos se girasen a mirar. 

-¡Es él! ¡seguridad! ¡sáquenlo de aquí¡- gritó el manager siendo seguido por uno de esos tipos corpulentos. 

-Massu márchate.. ¡corre!- le empujó haciendo que Masuda saliera corriendo antes de que le echaran de alli por las malas, y este no pudo hacer más que huir. 

-Tegoshi-kun, ¿estas bien?- le preguntó el hombre cuando llegó a su lado. 

-Uhm..- asintió sin dejar de ver como Massu se perdía tras aquel pasillo siendo seguido por ese tipo. -manager-san.. ¿puedo.. marcharme a casa?- le preguntó clavando la mirada en el suelo.  





Continuara.. 

Hola, por fin he podido acabar y subir el capitulo.. resulta que el domingo no pudo ser porque estaba mala, pero es que lunes y martes he estado aun peor y trabajando -_- hoy que por fin he descansado y me encuentro un poquito mejor, he aprovechado de acabarlo y subirlo, asi que aqui está.. un capitulo demasiado intenso donde se han descubierto muchas cositas.. habra que esperar a ver comos e va arreglando todo ^^ 

Pues no voy a decir mucho más.. solo que voy a tumbarme porque la cabeza me empieza a dar vueltas y mañana toca trabajar otra vez.. esto es culpa del estupido de mi jefe por tenernos 3 semanas sin calefaccion con tanto frio! pero bueno, toca recuperarse y combatir los dias duros que me vienen con las navidades.. asi que no aseguro un capitulo por semana hasta primeros de año.. supongo que subiré uno más antes de que acabe el año, y cuando todo vuelva a la normalidad, seguire subiendolo semanalmente.. 

gracias como siempre por vuestro interes en el fic y los comentarios, estaré esperando a ver que os ha parecido este ^^  asi que solo me queda desearos FELIZ NAVIDAD! 

Un amor entre acertijos (2/?)

Título: Un amor entre acertijos (1/?)
Pareja: Koyashige.

Warning: Lemon intenso (?)


Ante su mirada pérdida esa mañana algo fría, los días parecían ir a su pinta, lentos, oscuros, a veces llovía de vez en cuando, solo faltaba una buena tormenta de nieve para poder hacer que ese frío en su cuerpo aumentara pero al menos eso no iba a pasar, era bien preocupado de su salud y pocas veces podía agarrar algún resfríado o molestía que lo llevara a descansar, además de que estaba su trabajo, aquel que tantas experiencias le traía pero últimaente no estaba muy pendiente de ello, se veía distante, su cabeza dominada por un recuerdo algo confuso de una noche que ya llevaba días que fue ese encuentro tan casual e intenso con ese chico.

-Sí que esa persona te ha dejado hasta en las nubes ...- Reaccioné al poco rato de escuchar esa peculiar voz chillona, observé a el pequeño chico de cabello rubio que enseguida ya atacaba mis mejillas con sus dedos.

-¿D-De qué hablas?.- Trataba de hacerme el tonto un poco pero me daba cuenta que era difícil de engañarle y más con esa insistencia tan particular.

-Digo que … ¿Estás enamorado acaso?.- No queriendo que nadie más en ese café se enterara de lo que estaba pensando, sellé sus labios con una de mis manos no queriendo que hiciese escándalo tan temprano esa mañana.

-Ya vale, ¿No? No lo sé, es algo que nunca he comprendido la verdad y tú sabes mejor que nadie que he tenido malas experiencias así que de ese sentimiento paso, no por nada, decidí ser lo que soy ahora, ¿No?.- Un suspiro huyó de entre mis labios los cuales ahora eran tapados con esa deliciosa taza de café.

-Mo~. ¿Por qué eres tan llevado a tus ideas?¿Porqué no te das otra oportunidad?.- Miré con detenimiento a mi amigo el cual se encontraba frente de mi, bajé la mirada jugando con mis dedos en el borde de esa taza.

-Tú mismo sabes que es lo que pasó ...- Él prefirió en no insistir más y empezamos una conversación habitual entre nosotros, reímos y contamos algunos detalles de esas noches graciosas que a veces nos pasaban.

-Vale que ese dia eras todo un novato que ni siquiera podías ponerte el condón ...¡Como querías trabajar en eso siendo así!.- Nuestras risas no eran oprimidas por nada aunque tratabamos de ser algo discretos.

-N-No me molestes por ello, ahora soy todo un experto en la cama, ¿No? Estoy chulo ahora.- La risa nos invadia hasta que tuve que pagar ese menú y cada uno irse a su casa como correspondía, esa noche nuevamente teníamos trabajo pero algo en mi me hacía animarme aún más, algo en él me excitaba.
_______________________________________________________________________

Dos y tres horas pasaron desde que el trabajo iniciaba; era extraño que ese chico no se apareciera esa noche, siempre que le recordaba él se sentaba en el mismo rincón de ese enorme salón, ahora estaba vacío aunque dos chicas y un hombre mayor se sentaron ocupando ese espacio que siempre era reservado para él.

-No debería preocuparme de algo así, ¿No?.- Reí aunque realmente me sentía decepcionado, la chica que se agarraba de mi brazo me miraba confundida y preocupada por esa actitud que estaba dominandome toda la noche, ¿Dónde estaba él?

La noche avanzaba a medida que más personas salían e ingresaban a ese salón bien preparado para quienes buscaban una noche divertida y sin compromisos; mis manos sudaban por alguna razón al sentir ese beso lento de esa chica que me requería toda la noche. Sus manos se enlazaban a las mías acoplandose perfectamente pero me sentía ido, no queriendo hacer nada más pero no debía porque preocuparme de un chico el cúal debía de olvidarme, ¿No?

-Inaudito ...- La chica, asustada y con su ceño fruncido me observó, molesta y algo fastidiada me dejó en claro que no estaba haciendo bien mi trabajo; sin dejarla contestar tomé sus manos entre las mías, la arrastré hasta la zona más apartada del salón para apegarla a la pared y llevar sus manos a la altura de su cabeza para con una mano coger su barbilla y ese rubor notorio en sus suaves mejillas, sus ojos brillaban y sus labios curvaban una sonrisa coqueta.

-Lo siento, bonita; este adorable y algo apasionado chico, quiere ofrecerte como recompensa una noche sin compromisos y completamente para ti.- Ella no opuso resistencia alguna para morder mi barbilla y dejandome en claro esa acción como una respuesta positiva.

No tenía sentido recordar la noche anterior con ese chico, ¿Para qué recordarlo si yo solo era un host? Lo extraño de todo esto era que, esa nota que había hallado a mi lado nada más al despertar aún la conservaba, como una muestra de lo que había sucedido entre esas sabanas y esas cuatro paredes de la habitación del hotel, una noche que por más que quisiera, no iba a olvidar.

________________________________________________________________________

Mi cuerpo pesaba esa mañana, mis ojos se abrían suavemente para encontrarme con esa chica con la cual se había completado esa aventura; parpadeé un par de veces para levantarme de la cama y darme una buena ducha, necesitaba sacarme todo el cansancio de encima pero mis manos paseaban por mi cuerpo.

-¿Q-Qué diablos estoy haciendo?.- Mis manos no dejaban de pasearse por mi cuerpo nada más al recordar cada zona que él había inspeccionado con sus manos ese día, no era normal, incluso me estaba sintiendo un pervertido al estar haciendo “eso” pero tampoco hacía nada por detenerme en ese instante.

-¿-Porqué me haces esto?.- Mis mejillas rojas, mi respiración agitada y mi cabeza haciendose hacia atrás a medida que mis manos iban de arriba hacia abajo en un vaivén completamente perfecto, mi duro miembro era rozado por mis propias manos llevandome a un clímax pero mi mente solo enfocada en esos vagos recuerdos ambiguos pero plenamente calientes.

Estallé en un orgasmo único pero llevé una de mis manos a mi boca queriendo callarme, en cierta forma, recordaba que esa chica aún seguía durmiendo y no deseaba que me oyera, menos que pensara que después de esa noche había quedado insatisfecho y me masturbaba en pleno comienzo de la mañana.

________________________________________________________________________

Ya tumbado en la cama y con una mano en mi vientre sin entender ni yo mismo que eran esos comportamientos que estaba adquiriendo solo por el hecho de compartir una noche diferente, más que nada, no entendía como es que ese chico había penetrado en mi mente para dominarla, para abundar en ella.

-¡Ya basta!.- Fui al baño casi corriendo para mojar mi rostro variadas veces, en realidad, ni yo me creía el hecho de que estaba comenzando a gustarme, era cierto que por mi trabajo a veces me acostaba con hombres que me requerían pero siempre iba a por chicas, me gustaba cortejar y ser sociable con personas que aparentemente eran agradables a la vista pero que en la cama cambiaban completamente y me gustaba esa sensación de aventura, de lo desconocido pero esta vez era irreal, ¡No me gustaba esto!
Ya las horas pasaron, mi traje se veía completamente bien acoplado a mi cuerpo delgado pero nada más al terminar de arreglarme la corbata dudé ese día en ir o no.

-Será correcto, ¿No? … Después de todo yo nunca he faltado al trabajo pero … Así como estoy ...- Llevé mi mano a mi cabello oscuro, no sabía que hacer, un aprieto empezaba a agobiarme pero no era de los que faltaban al trabajo solo por una excusa barata. Me armé de valor para dirigirme a mi coche y así nuevamente ponerme en marcha al trabajo.

________________________________________________________________________

-Y yo que pensaba que no vendrías por la hora ...- Un pequeño puchero era esbozado en sus labios y llevé mi diestra para jalar una de esas mejillas ya algo sonrosadas.

-¿Es que ibas a extrañarme?.- Río de esa forma tan característica que tenía, burlona y chillona, cogió mi otra mejilla para jalarla.

-Ya sabes que me gusta competir contigo y … Contarte mis experiencias, ¿No?.- Le escuché reír y ya andaba llamandolo un chico, era algo parecido a su estatura, con cabello algo rojizo y una mirada demasiado nerviosa.

-Alguien ya te solicita~ Chico chulo.- Nada más al llamarle la atención por ello le vi nervioso, y ¿Esa actitud? Se acomodó como pudo su traje plateado y bien dominante para llamar la atención hasta apartarse de mi e ir a con ese chico que le notaba que no tuviese ninguna experiencia, ¿Algo pasaba allí, no?.

Estuve en la barra por unas buenas horas, las personas hablaban conmigo pero yo no estaba de buenos animos, la verdad es que ni yo me entendía que es lo que me ocurría ese día, mi mente hecha un lío solo me convencía de que me devolviese a casa; Tegoshi se había ido con ese chico y la verdad es que me encontraba bien aburrido y sin ganas de vivir una aventura ese día. Al jefe no le gustó mucho que ese día me retirase temprano pero no me estaba llendo bien con el negocio y solo pensaba en descansar. Salía del lugar algo desperanzado hasta que choqué con alguien, acaricié mi nariz al darme ese golpe pero sin poder reaccionar aquella persona me cogió cubriendome la boca para llevarme a un callejón que quedaba al lado de mi lugar de trabajo, trataba de zafarme, ¿Alguien quería robarme? Eso no iba a suceder porque era un poco más fuerte que él, me lanzó contra la pared de ese lugar sombrío hasta que sentí unos labios sellar los mios, eso no me lo esperaba para nada y al abrir mis ojos me encontré con esa mirada que ya había leído una noche.

-T-Tú ...-No me lo podía creer, era como que hubiesen pasado días desde que llevaba esperandole, al fin pude verle y poco a poco caí rendido a esa pasión que empezaba a brotar en mi, era increíble como es que una persona te hiciese reaccionar de esa forma.

-Sé que me extrañabas pero tenía asuntos que responder … ¿Me has estado engañando?.- Esa pregunta me había sorprendido la verdad, él sabía de que consistía mi trabajo y la verdad es que ni siquiera es que saliésemos o algo así, solo nos habíamos acostado una vez.

-¿De qué hablas? Sabes bien de que va esto ...- Le escuché reír aunque oírle en ese plano dominante y bien receloso por la simple razón de que alguien hubiese recorrido mi cuerpo me hizo sentir extraño y nostálgico.

Nuestros besos se elevaban aún más, una temperatura mayor a que normalmente había en mi cuerpo, sus manos paseaban por mi torso queriendo acariciar lo que más quería aunque ya sus manos deseaban colarse por mi ropa, era peligroso en el lugar en donde nos encontrabamos y me di la vuelta queriendo separarme un poco.

-Creo que aquí no es un buen lugar … podrían vernos.- Estaba nervioso ya que la gente pasaba delante del callejón y digamos que en si no estabamos tan a oscuras y luego sentí un dolor en mi cuello haciendome estremecer y dejandome atrapar por ese abrazo algo apretado y como parecía una bestia nocturna con esa actitud tan caliente que tenía.

-La verdad … Es que me parece un buen lugar para que este chico se coma por completo a su presa.-Esa actitud no me la esperaba, su actuación era genial aunque no sabía muy bien de que iba esto pero la forma en la cual me dominaba ya me tenía en las nubes y en completa excitación.

Esos besos y sus manos acariciar por completo mi cuerpo me tenían loco, era como vivir una aventura prohibida la cual estabamos en riesgo de que alguien nos viera en ese callejón. Mordí su barbilla con cierta coquetería, a veces era un descarado cuando se trataba de algo en especial, nunca alguien me habia llevado a ese extremo, era la primera vez que tenía esas ansias de seguir algo por lo cual hasta nos llamarían la atención por tener sexo casi en público.

Sus manos paseaban por mi cuerpo de forma salvaje queriendo despojarme de mis ropas, de vez en cuando me resistia a esa actitud pero no podía hacer mucho, estaba siendo llevado por esa actitud, dominado por esa necesidad de ambos cuerpos volver a friccionarse, rozarse y unirse de una sola forma caliente y placentera; me obligué a rozar mi rostro contra la fría pared que estaba en frente de mi, mi trasero se movía descaradamente contra su miembro el cual estaba bien erecto, ese efecto solo podría lograrlo yo, ¿No? Quería creer que podría ser algo así, escuché el cierre de su pantalón bajar, yo ya me encontraba con los mios abajo completamente junto con mi ropa interior, mi camiseta con los botones desabrochados dejando a la vista mis pezones duros y erectos cuando esos dedos helados recorrían cerca de ellos pero gemí fuerte cuando dos de sus dedos entraban en mi cavidad estrecha haciendo mi cuerpo temblar.

-E-Espera ...- No quería que fuese tan rápido pero un beso en mi cuello me hizo derretir y querer seguir de esa forma tan desenfrenada pero nada mas al darnos cuenta un par de personas estaban echando un vistazo al callejón en donde nos encontrabamos, me quedé helado por un momento hasta que mis labios fueron sellados por sus manos y le escuché reír ayudandome a subir mi ropa, los dos teníamos una actitud adolescente, como si quisieramos experimentar de alguna forma y eso casi había sido perfecto.

Entre risas y besos húmedos llegamos a la habitación de un hotel queriendo seguir lo que habiamos dejado en ese lugar oscuro, ahora podría ver su cuerpo completamente iluminado por la lámpara de la habitación así como su rostro, nos desnudamos hasta acabar entre las sabanas blancas de esa habitación grande. Sus manos acariciaban y apretaban mis muslos con cierto descaro así como mis manos se posaban en su espalda queriendo arañarla. Besos calientes, nuestras lenguas rozandose, nos separamos un momento para tomar algo de aire pero mis labios fueron exclusivamente a succionar su lengua escuchandole gemir así como mis dedos rozaban sus botones rozados los cuales se ponían duros debido a mis roces.

La cama se movía de una forma brusca ante sus embestidas las cuales atravesaban mi cuerpo plenamente, estaba aferrandome a ese fierron que unía la cama con la pared mientras que sus besos iban a mi espalda incluso mordiendome sin desenfreno alguno. Nuestro cuerpo chocaba el uno con el otro haciendo un sonido que nos hundía en un gozo solo entre nosotros dos. Sus gemids llegaban a mis oídos para llenarse de ellos así como toda la habitación era presencial de ese encuentro tan salvaje y captador de nuestros gemidos.

Acabamos cansados en la cama, él dentro de mi no dejaba de palpitar sintiendo su semilla caliente incluso escurrirse por mis piernas, no quería decir nada con el miedo de arruinar ese instante en que los dos habiamos vuelto a encontrarnos.

Me hizo girarme hasta que pude verle con esa expresión despues de un orgasmo tan profundo, nuestros labios se sellaron en un beso pasional y exquisito así como sus manos me rodeaban de una forma protectoca y posesiva hasta que de ese modo los dos acabamos completamente dormidos sin decirnos nada más.

________________________________________________________________________

Mis ojos estaban algo pesados pero cuando quise moverme y rozarse con ese cuerpo que se encontraba a mi lado solo pude sentir un frío inmenso que me hizo abrir los ojos al instante, otra vez había huído después de que pasaba la noche junto a mi, era la segunda vez que lo hacía, me imaginaba que tenía razones para hacerlo pero tenía ganas de verle nada mas al despertar aunque ¿Quipen querría ver el rostro de un chico dormido despué sde tener sexo y más cuando se trata de un chico qu trabaja de noche? Negué un poco moviendo mi cabeza de un lado hacia otro, me abracé a la almohada un poco queriendo hundir mi rostro en esta pero al moverme un poco pude ser capas de sentir algo mas en la cama, una pequeña nota.

“ Juguemos a que nos tenemos hace tiempo, a que nos pertenecemos sin freno, a que sabes clausurar mis labios con el agua miel de tus besos”

Nunca entendía el propósito de estas notas, ya con esta sería la segunda, eran como pedazos de frases de libros o poesía, no sabía como es que llegaban a mi, ¿Se trataba de ese chico? Quería preguntarle y eso haría la próxima que nos encontrasemos cara a cara. Suspiré hasta coger la toalla e ir a darme una buena ducha, ya tocaba ir a casa, tomar desayuno y tan solo dedicarme a lo que ya hacía siempre.

________________________________________________________________________

-Hey~. ¡Keii-chan!¡Keii-chan!.- Desperté de mis pensamientos al escuchar esa voz chillona queriendo atraer toda mi atención hasta que enseguida sentí como me pegaba levemente en mi frente con uno de sus dedos.

-Ya te oí~. Disculpa.- Suspiré un poco mirando esa expresión infantil pero luego sonriendo de una forma bien traviesa.

-¿Quieres escuchar mi historia o es que acaso tienes algo que contarme?.- Ladeó la cabeza queriendo indagar en mis pensamientos, yo no podía ser capas de aparentar nada y menos cuando era algo que tanta distracción me traía.

-He vuelto a ver a ese chico, tenido una noche realmente apasionada … Esto nunca me había pasado con otros clientes.- Sonreí de una forma tenue aunque no entendía muy bien ni me enteraba de que es lo que estaba sucediendo.

-Que suerte tienes~. Yo he tenido una noche algo extraña … ¡Ese chico no dejaba de sonrojarse y ser realmente tan inseguro! Aún así tiene algo que lo hace ser lindo, tal vez es porque es algo ingenuo y a la vez sin experiencia~.- Le escuché reír en un tono burlón pero diferente.

-Será porque ¿Te recuerda a como eras antes de trabajar?.- Piqué una de sus mejillas queriendo molestarle de algún modo pero fue cuando me quedé de piedra un instante al ver a ese chico caminar con un traje de etiqueta, con un bolso como si fuese a trabajar.

-E-Es él ...-Entrecerré mis ojos queriendo percatarme de cada expresión de su rostro y su cuerpo, no había duda alguna, se trataba de ese chico pero cuando quise perseguirle no me atreví a ello, pensaba que sería mala idea.

-Lo mejor es dejarlo pasar … No creo que sea buena idea en seguirle.- Tegoshi asintió leve cuando le dije aquello, era mejor dejarlo y solo tratar de obsesionarme con algo que no podía ser.

-A veces me pregunto si es buena idea seguir en esto ...- Me miró impresionado para luego llamarme la atención.

-¿Dudas de lo que haces? O ¿Lo del pasado aún lo tienes en mente? Tú mismo lo dijiste hace tiempo, el no volver a enamorarte por nadie que conocieras de una noche, además que tú igual me viste en un estado algo similar despues de lo que pasó hace dos años, es por eso que nos volvimos amigos e hicimos esa promesa … Solo divertirnos y hacer sentir bien a los demás, no?.- Esas palabras me volvieron a mi objetivo principal.

-Aunque tenemos una forma extraña de hacer sentir bien a los demás, ¿No?.- Los dos reímos de una forma tranquila pero lo mejor era ya no hacernos ilusiones con algo más, después de todo nuestras experiencias nos habian hecho reaccionar y ser en ese aspecto un poco fríos con respecto a tener alguna relación formal.

Llegué a mi casa nuevamente como de costumbre cada mañana pero quise ir en busca de algo que recordaba tener bien guardado, subí a mi pequeño desván hasta encontrar una pequeña cajita de un clor amarillo claro que estaban sellada con cinta adeshiva, la abrí con mis manos temblorosas y con demasiada duda.

-Veo que aún sigues aquí, ¿No?.- Saqué de allí una pequeña foto que estaba bien cuidado a pesar de los años que llevaba en esa pequeña cajita de papel, sonreí algo triste al poder volver a desenterrar esos recuerdos que una vez quise olvidar por completo, esa persona ya no estaba a mi lado.

-Si volvieras a verme me regañarías, ¿No? Por trabajar en algo que no es para mi después de cuando te conté e hice saber de mis sueños … Pero eso no va a pasar.- Dejé esa foto en la caja nuevamente guardandola donde siempre debía de estar. 

Esa noche no había trabajo por el asunto de que el jefe quería hacer remodelaciones así que encontré que era una buena manera de descansar un poco de todas esas emociones mezclada que estaba teniendo, era peligroso tener que vivir de nuevo una atracción, fui tonto en un pasado y mi objetivo era claro, no quería volver a enamorarme. Después de cenar y ver algo de televisión me dispuse ir a mi habitación para descansar, me lancé a esta hundiendome en la almohada sin dejar de reír pero giré mi cabeza hacia esa mesita de noche en la cual esas dos notas estaban puestas allí, no entendía el objetivo de ello pero lo mejor era pasar de eso y no pensar en mas tonterías.




(Espero que este capítulo halla sido de su agrado, yo ¡Al fin tengo vacaciones! Exceptuando tres examenes que debo de dar esta semana pero al menos ya no tengo clases ni nada de eso~ Así que me dedicaré a seguir esta historia que no quiero dejarle inconclusa por nada xD ... Bueno se han ido desvelando algunas cosillas, ¿No? La verdad es que poco a poco Koyama se esta dando cuenta que nuevamente nace algo en él pero que no quiere volver a pasar por lo mismo además de que solo ha tenido un encuentro con ese chico dos veces, ¿será posible que se esté enamorando de alguien que ni conoce? puede ser pero tiene bien en cuenta que no va a volver a caer en algo que ... Ya los misterios se sabrán a medida que siga la historia xD De antemano gracias por comentar y sobre todo leer esta historia ^^ Gracias!)

Yakusoku "promesa" (capítulo 6)

YAKUSOKU "PROMESA" - Capitulo 6

Autor: Saiikeiilove

Resumen: Massu y Tegoshi se hacen una promesa cuando eran unos niños, 20 años después vuelven a reencontrarse.

Pareja: Teggomass

Genero: Romantico, Drama
Advertencia: lemon en un futuro




El sol ya hacia rato que entraba por la ventana, la luz y el canto de los pajarillos no le dejaban dormir más.. pero lo peor de todo, es que no quería levantarse de la cama por culpa de ese fuerte dolor de cabeza. 

Massu acabó incorporándose en la cama, y antes de levantarse, se revolvió el pelo y presionó sus sienes en un intento porque ese terrible dolor se fuera. ¿Desde cuando no se emborrachaba asi? quizás desde que acabó sus estudios y comenzó a trabajar.. pero una resaca como esa, ¡no la recordaba! y todo había sido culpa de ese muchacho; Nagisa.

-Vaya, por fin despiertas, ¿qué tal la resaca?- le preguntó Shige cuando se encontró a su compañero de piso frente a él con mala cara.

-Me duele la cabeza~~- refunfuño con la voz ronca, sentándose seguidamente y apoyándose sobre la mesa.

-Ten, come algo y tomate una aspirina, eso te ayudará.- Shige sonrió cuando Massu alzó un poquito la mirada para verle. 

Ya sabia que Masuda había llegado terriblemente perjudicado la noche anterior.. él mismo le había tenido que meter en la cama con la ayuda de Koyama.. y es que tras ver a Yuya con ese hombre, Massu no había parado de beber hasta que consiguieron sacarle del local.

-Gracias..- le dio un mordisco a lo que Kato el había preparado, y seguidamente se tomó la aspirina. -siento haberos causado problemas anoche.. no suelo beber tanto.- bajó la mirada.. era cierto, pero el simple hecho de ver a ese chico con ese hombre y saber que estaban juntos, le había afectado más de lo que creía.

Shige no dijo nada.. solo se sentó junto a Massu viéndole comer despacito.. y cuando este le miró de nuevo, suspiró cruzándose de brazos..

-¿Y si te olvidas de Nagisa-kun? has vuelto a Japon para encontrar a otra persona ¿no?- le preguntó alzando la ceja, con cierta psicología.. pero ya sabia lo que estaba pasando.

Massu le miró sorprendido. ¡Cierto! ¡estaba alli para encontrar a ese niño! ¡no para andar discutiendo y pasándolo mal por un muchacho mal educado y desagradecido al que acababa de conocer!

-Tienes razón..- suspiró y bebió un poquito más de café. -pero es que... ahora...- se mordió los labios; jamas pensó que mientras buscaba a ese niño otra persona se cruzaria en su camino.

-Ahora te has enamorado de Nagisa-kun y esa otra persona ya no importa tanto, es eso ¿no?- Massu asintió levemente. -está bien, no tienes que sentirte culpable.. hace años de eso, solo tienes que tener algo claro; si lo que quieres es olvidarte del pasado y centrarte en el presente, o de lo contrario, ignorar el presente y seguir persiguiendo el pasado..- Kato le sonrió suavemente, de algún modo, quería ayudar a Massu.

-Centrarme en el presente.. en.. Nagisa-kun..- lo pensó un momento.. ?pero qué pasaba con Tegoshi? ¿debía olvidarse de él? no, no podía hacerlo del todo. 

******************************* 

Miró la puerta de nuevo  y alzó su mano volviendo a bajarla sin atreverse a llamar. Allí estaba, de pie frente a la puerta del apartamento de Koyama.. pensándose si llamar o no al timbre.  ¿Desde cuando era tan cobarde? ¡antes no se pensaba tanto las cosas! las hacia y listo, así fue como llegó a dar con ese trabajo..

Tomó aire y frunció el ceño decidido a hacerlo.. pero justo cuando fue a llamar, la puerta se abrió encontrándose de cara con su vecino.

-Nagisa.. ¿qué haces aquí?- le preguntó un poco sorprendido, pero Yuya desvió la mirada algo molesto. -¿uhm? ¿te hace falta sal?- 

-¿Qué estas hablando de sal? ¡no es eso! he venido porque...- le encaró, pero se quedó callado mordiéndose el labio.

Koyama le sonrió amablemente; al parecer ese chico quería algo de él.. le necesitaba para alguna cosa.. y aunque no sabia que era, estaba dispuesto a ayudarle. 

-¿Sabes qué? iba de camino al trabajo, puedes venir conmigo, te prepararé un plato delicioso de ramen.- por un momento se preparó para llevarle a la fuerza, pero cuando Yuya asintió levemente, Koyama solo pudo sonreír un poquito más. -vamos, no está lejos.- le tomó de la muñeca, y tras cerrar la puerta de su casa, se lo llevó de allí.

Al rato ya estaban en aquel humilde restaurante que la madre de Koyama dirigia. Una vez estuvo tras la barra y Tegoshi sentado en ella, comenzó a cocinarle aquel ramen que le había prometido. 

-No era necesario que me trajeras todo el camino de la mano.. nos ha mirado todo el mundo.- le recriminó sin dejar de mimarle enfurruñado.

-Nos miraban porque gritas demasiado.- rió mientras preparaba aquello. -y bien.. ¿para que querias verme? si no te hacia falta sal.. ¿qué era?- le preguntó poniendo el ramen ya preparado ante los ojos de Yuya. 

-Necesito.. contarte algo importante.. pero antes prométeme que no se lo contarás a tu.. novio.- ¡él menos que nadie quería que se enterase! si lo hacia, Massu acabaría descubriendolo. 

-¿Qué ocurre?- Koyama se puso serio, por un momento hasta se asustó de que fuera algo grave.

Tegoshi tomó aire.. probó un poquito de ese ramen dándose cuenta de que realmente estaba delicioso, y seguidamente sacó de su bolsillo una foto... la extendió ante la mirada de Keiichiro, y cuando este reconoció a uno de los niños de aquella foto antigua, miró a Tegoshi sorprendido. 

-Este niño.. soy yo, y el otro..-

-Massu...- murmuró Koyama completamente sorprendido.

-Si, Massu..- Tegoshi asintió levemente dándole la razón, observando aquella sonrisa que no parecía haber cambiado en 20 años. 

-Pero entonces... tu eres.. ¿la persona a la que Massu está buscando?- si, algo sabia de que Masuda habia vuelto a Tokio para encontrar a alguien... pero lo sorprendente, es que ya le habia encontrado ¡y ni lo sabia!

Ante aquellas palabras, Yuya le miró sorprendido. ¿Le estaba buscando? ¿Massu había vuelto a Japon para encontrarle? ¡eso era imposible! ¡ni siquiera le había reconocido! ¿como iba a estar buscándole? 

-¡Él no puede saberlo!- le advirtió rápidamente. -¡no puede saber quien soy!- en ese momento le dio igual que le estuviera buscando, eso no solucionaba anda.

-Está bien, tranquilo.. pero como... ¿no se ha dado cuenta por tu nombre?- aquello no dejaba de sorprenderle.. ¿es que Massu no recordaba el nombre de ese niño?

-Porque no me llamo Nagisa.. ese era el nombre de mi madre.- le confesó mientras comía algo más tranquilo ante la mirada sorprendida del mayor.

-Entonces.. ¿cual es tu verdadero nombre?- le preguntó con cierto miedo y curiosidad al mismo tiempo.. ¿por qué le había mentido a él cuando se presentaron?

-Tegoshi.. Yuya..- le miró a los ojos; decidido, firme.. ya le había confesado la verdad a Koyama. -¡no puedes contárselo a Massu! tampoco a tu novio ¿me oyes? yo.. necesito confiar en alguien.. y tu eres lo más parecido a un amigo que tengo.- agachó la cabeza, y en ese momento sintió la mano de Keiichiro revolver cariñosamente su cabello platino. 

-Tranquilo, puedes confiar en mi.- le aseguró sintiéndose en ese momento alguien especial para ese chico tan solitario.. aunque aun no entendía por qué no quería que Massu le reconociera si ellos eran amigos de la infancia. 

-Tengo que irme a trabajar.. gracias por la comida, el ramen estaba realmente delicioso.- se puso de pie y fue a pagar, pero Koyama le detuvo. 

-Espero que vuelvas otro dia.- 

-Lo haré, gracias...- le sonrió suavemente, guardó la foto, y se dio media vuelta para marcharse de allí. 

Koyama se quedó mirándole pensativo.. todo aquello era como de película.  Tegoshi le había pedido no contarle nada a Massu.. pero Massu  habia vuelto a Japon solo por buscar a "alguien".. y ese alguien resultaba ser Tegoshi.. ¡ya le había encontrado! 

Suspiró recogiendo el plato, pero entonces, se agachó a recoger algo del suelo.. una tarjeta con una dirección escrita en ella.. y unas iniciales T.Y. ¿ahí era donde trabajaba Tegoshi? ¿una productora? 

*************************** 

Los días pasaron.. lo había pensado mucho, y en cierto modo, se había olvidado de aquel niño al que había ido a buscar a Japon. Shige le había abierto los ojos; lo mejor era centrarse en el presente, en Nagisa.. se había enamorado de él como en su dia lo hizo de ese pequeño, aunque lo tenia realmente difícil.

Miró hacia la puerta del apartamento de Tegoshi, se preguntaba si él estaría en casa.. pero no estaba allí por eso, ¡no iba a confesarse nada a ese muchacho! simplemente no podía decirle que le gustaba. 

Suspiró y tocó a la puerta de Koyama sosteniendo aquella cajita de dulces recién comprados en la mano. Ya había podido adivinar que al novio de su compañero de piso le encantaban esos pasteles, y como pasaba por allí cerca, se había decidido a comprar algunos y tomarlos esa tarde.. aunque a decir verdad, aquello le resultaba una mala excusa para cruzarse con Yuya.

Llamó de nuevo, pero Koyama no parecía estar en casa, aun así, se mantuvo allí un poquito más, hasta que la puerta contigua se abrió.  Ambos se miraron; Tegoshi le miraba con cara de pocos amigos, de fastidio incluso...  en cambio Massu solo saludó con un tímido "hola".

-¿Otra vez tu por aquí? vas a hacer que tenga que llamar a la policía.- le dijo en un claro tono amenazante mientras cerraba la puerta de su casa.

-Te estas confundiendo, venia a ver a Koyama.- señaló los dulces, y Tegoshi miró la cajita sin interés alguno. 

-Keii-chan está trabajando, deberías saberlo si sois tan amigos.- le miró receloso, ¿aquello era una excusa?

-Ah.. no sabia que se marchaba tan temprano.. en realidad pasaba por aquí cerca y quise comprarle esto...- le explicó algo nervioso mientras Yuya le seguía mirando de esa manera. -un momento... no pensaras que.. he venido a buscarte a ti, ¿no?- le preguntó algo enfadado al percatarse de esa mirada desconfiada pro parte del más joven, ¡ese niño era un egocéntrico!

-Yo no he dicho nada.. solo se que a cada momento tengo que encontrarme contigo, y eso no me gusta.- fue a marcharse, pero Massu le cortó el camino.

-¿Se puede saber que te he hecho para que me trates asi?- le preguntó totalmente ofendido.. ¿como había podido enamorarse de él? de ese modo, jamas se confesaría.

-No me caes bien, te odio.- le dijo rotundamente, pero en ese momento, se dio cuenta de como la mirada de Masuda cambiaba a una realmente triste. 

-Entiendo.. ¿podrías.. hacerme un favor entonces?- le extendió la cajita de dulces a Tegoshi, pero este se quedó mirándolo salgo distraído. -¿puedes guardarla en tu casa y dársela a Koyama cuando vuelva? así.. no tendré que venir más por aquí ni tendrás que cruzarte conmigo.- ante esa actitud decaída, pero sin perder ese leve sonrisa, Tegoshi cogió la cajita asintiendo suavemente. -gracias.. que te vaya bien Nagisa-kun.- se marchó de alli rápidamente, antes de que sus ojos acabaran de nublarse. 

-Oye, espe...- se detuvo y mordió su labio inferior.

Massu se había marchado de allí solo con decirle eso.. pero  aquella expresión tan triste, esos ojos brillantes a punto de llorar, le hizo sentir como una mala persona... aunque después de todo, era mejor alejarse de él.

**********************************

-¿Estas hablando en serio?- preguntó Shige completamente sorprendido. - ¿vas a volverte a Los Ángeles?-

-Si.. no hago nada aquí, así que vuelvo a casa.- se secó las lagrimas algo enfadado consigo mismo; por haber sido tan estupido de dejarlo todo para buscar a un imposible, y por ser aun más idiota al enamorarse de un niño engreído que le odiaba.

-Pero no puedes marcharte.. es decir.. ¿qué pasa con esa persona a la que has venido a buscar?-

-Ya da igual, no la encontraré.- 

-¿Y .. Nagisa-kun?- le dio miedo preguntar, imaginaba que algo había pasado con ese chico nuevamente. 

Massu le miró enfadado, como si fuera a matarle o algo así por el simple hecho de pronunciar ese nombre.. pero entonces, rompió a llorar como un crío.

-¡Nagisa-kun me odia!- murmuró de forma casi in entendible, y en ese momento, Kato le abrazó intentando consolarlo.

************************************** 

-¿Dices que Massu ha estado aqui para traerme estos dulces?- sonrió encantado al tener esa cajita llena de dulces sobre su mesa.

Tegoshi asintió con la mirada algo perdida. Koyama le había hecho entrar a la fuerza cuando fue a llevarle los dulces al oírle llegar a casa... y mientras el mayor iba corriendo a preparar te, Yuya no pudo evitar recordar aquella expresión en el rostro de Massu.

-Keii-chan, debería irme a casa, mañana tengo trabajo y es muy tarde.- le dijo cuando Keiichiro llegó con el te y una amplia sonrisa. 

-Pero solo será un momento, un poco de te y un par de dulces.- le sonrió sirviendole.

-Es que.. no me gusta el dulce.- suspiró, y cuando abrió los ojos, se encontró con la mirada asustada del mayor.. -¿qué pasa?-

-¡Eres como Shige! ¡no te gusta el dulce!- 

-¿Y qué pasa con eso?- refunfuñó sin dejar de mirarle.

-Que no es divertido comer dulces con alguien a quien no le gusta.- rió cogiendo uno de ellos, pero enseguida centró la mirada en Yuya. -entonces.. ¿has hablado hoy con Massu?- ante aquella pregunta, un leve sonrojo cubrió las mejillas del más joven. 

-Solo me dejó los dulces...- cogió uno pequeñito dándole un mordisco ¿quien comía dulces a entradas horas de la noche? 

Tegoshi comió en silencio ante la atenta mirada del mayor. ¿Por qué tenia que sentirse culpable de la forma en que Massu se había marchado de allí? ¡no le había hecho nada malo! solo decirle la verdad. 

-Oye Nagisa.. digo, Tegoshi.. ¿en qué trabajas?- le preguntó con cierta curiosidad, había querido hacerle esa pregunta desde que encontró esa tarjeta el dia del restaurante de ramen.

Yuya alzó la mirada mirándole con cierto pánico. No podía decirle en que trabajaba, por eso casi siempre le daba aquel nombre falso a sus conocidos.. y realmente, ese trabajo comenzaba a ser algo por lo que no se sentía nada orgulloso. 

-En nada especial.. solo lo que va saliendo..- se levantó rápidamente, era hora de marcharse y cortar ahi la conversación. -ahora tengo que marcharme, es tarde.- antes de que Koyama pudiera decirle algo más, salió de allí agradeciéndole por el dulce.

-De nada...- murmuró viéndole salir por la puerta a toda prisa... Tegoshi era demasiado misterioso a su parecer.

************************ 

El dia pasó rápido; ya tenia hecha la reserva del avión para salir a la mañana siguiente,  y sus cosas estaban ya prácticamente empaquetadas de nuevo. No había vuelta atrás; volvería con su familia, y se olvidaría de Nagisa, ¡de Tegoshi incluso! aunque había hecho un par de buenos amigos en Tokio, nada le ataba allí.

Salió a buscar a Shige para contarle que se marcharía a la mañana siguiente y le dejaba el dinero del alquiler por adelantado, pero este había dejado una nota diciéndole que estaría en casa de Koyama esa noche... eso le hizo sonreír; ellos dos se llevaban realmente bien, y hacían una pareja preciosa. 

Suspiró y fue a darse un baño de agua caliente. Le daba lastima dejar alli a ese par de amigos, pero quizás una despedida seria demasiado dramática.. asi que casi lo mejor seria no hacerlo personalmente. 

******************************* 

A la mañana siguiente, Koyama despertó algo temprano. Había pasado la noche un tanto inquieta a pesar de que Shige la había pasado con él.. pero el hecho de enterarse por su novio de que Massu tenia la intención de volver a Los Ángeles, no le había dejado quitarse de la cabeza el hecho de saber que "Nagisa", era esa persona a la que él había ido a buscar.

-Buenos días~~- besó la espalda del mayor, pero le notó algo distraído. -oye.. ¿qué te pasa? llevas asi desde anoche, es que ocurre algo?- Koyama era tan simple, tan notorio, que se había dado cuenta enseguida. 

-No... estoy bien.- le sonrió, pero cuando fue a besarle, Kato le detuvo.

-Mentira.. te pasa algo, y vas a contármelo si quieres que te ayude.- le dijo algo serio.

Koyama le miró un momento, hasta que rompió en un profundo suspiro y se revolvió el cabello nervioso. Podía confiar en Shige ¿verdad? ¡era su novio! y una persona muy sensata e inteligente a pesar de sus 26 años.. él podría darle algún consejo sobre que hacer.

-Le prometí a Nagisa que no contaría algo, pero.. no quiero que Massu se marche..- nada más decirle eso, Kato le prestó toda la atención del mundo. -Nagisa.. es... la persona a la que Massu ha venido buscando.- tras confesarle aquello, Shige abrió los ojos de par en par. 

-Tienes que decírselo, Massu va a marcharse si no lo haces.-

-Pero si lo hago, Nagisa, quiero decir Tegoshi, ¡no confiará en mi! él sabe quien es Massu, y no quiere que le reconozca, no puedo ir y contárselo.- ¿como se había metido en todo ese lío? claro.. por intentar acercarse a Tegoshi.

-¿Y está bien que nos callemos  eso sabiendo que Massu quiere encontrar a esa persona? que se ha enamorado dos veces sin saber que es la misma persona? ¿sin darle una oportunidad para que ellos arreglen lo que sea?- aquello hizo que Keiichiro guardara silencio, pero justo entonces, sonó el móvil de Shige. -es Massu..- murmuró antes de contestar.- buenos días Massu.- se acarició un poco la cabeza, pero al otro lado de la linea, Masuda le dijo algo que le hizo sobresaltar.. -Massu.. está en el aeropuerto esperando a coger el avión para los Ángeles.- le dijo a Koyama dejando a este igual de sorprendido, y cuando intentó hablar de nuevo, Massu ya había cortado. 



Continuará.

Pues aqui el capitulo 6 cuando pensaba que no lo subiría hoy.. pero aqui está, justo antes de acostarme (y aprovechando que mañana es fiesta en España y no trabajo) 

este capitulo se me ha hecho más intenso a la hora de escribirlo.. tenia una idea y tuve que ordenarla un poquito, pero me gusta el resultado ^^ ni yo misma pensaba que Koyama se enteraría antes que nadie de quien es Nagisa realmente.. pero me gusta así, ha quedado en bastante suspense ahora, incluso para mi a la hora de escribirlo ^^ 

Bueno, queria aclarar algo.. aunque no haya puesto que el fic tambien es Koyashige, (aunque realmente no lo sea) tambien he querido darles bastante protagonismo desde el principio, ellos dos son una parte importante de este fic ^^ 

Y bueno, ya queda menos para que Massu se entere de la verdad, o no? eso se vera en el capitulo 7 ^^  por cierto, sintiéndolo mucho, no se si lo tendré para el fin de semana que viene.. me vienen dias muy pesados de trabajo con las Navidades, sin descansos.. asi que solo podre escribir de domingo en domingo.. con lo cual no se si tendré un capitulo semanal o ya sera cada 2 semanas hasta que pase todas las fiestas.. aun asi, intentaré tenerlo cuanto antes como siempre.

Por los comentarios, muchísimas gracias a todas, de verdad que no sabes lo que ayuda eso a seguir un fic, asi que espero seguir leyéndolos para saber que os parece ^^ 

Ahora si me despido hasta el siguiente y me voy a dormir que es tarde!!